Hoy te escribo este poema
que no menciona a la luna ni la noche,
ni la profundidad ni la inmensidad del mar
que no habla de la lozanía de las rosas.
Sí, hoy te escribo un poema
que no habla de paisajes coloridos
ni golondrinas surcando libremente
los cielos del universo.
Escribo un poema que pretende
rozar con mis dedos tu alma
tu risa y tu inmensidad
tu inmensidad…
Este poema busca en sus letras
que sientas la fuerza y autenticidad de mi amor por ti
sin comparaciones, ni rimas, ni metáforas
un poema que habla de ti.
De lo hermoso de tu sonrisa, de tu nariz chata
y tus cabellos rizados, de tu piel ni blanca ni canela
solo tu piel,
tú y tu sentimiento, que me incluye en tu vida.
Amor, tú y el recuerdo de esa mirada,
que describe todo sin decir nada
de ese beso tierno a las orillas del mar,
de esa discusión que terminó en una abrazo y beso eterno.
Tú, simplemente tú y nadie más…
tú y el amor que siento por ti
que a pesar de ser enorme
cada día se jacta de serlo más.
Espero que siempre
me grabes en tu alma,
veas cuanto te quiero
y jamás me borres de tu corazón.
Colaboración de Edder Candelaria Rosales
México
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