Un famoso kabbalista dijo una vez: "Si tan sólo pudiera amar a la persona más justa del mundo como el Creador ama a la más perversa".
Sin importar que, con todas las buenas razones que hay para no ser amable con la gente, todavía tenemos que recordar que todos tienen la Luz dentro de ellos. Puede que en algunos esté más cubierta que en otros, pero está ahí.
Hoy, hazte el propósito de encontrar la Luz en la persona que más te molesta
Yehuda Berg