"En México tienen un gran edificio con un gran tanque de látex
y los trabajadores son elegidos de acuerdo al tamaño de la mano.
Cada persona camina hacia el tanque, sumerge sus manos, y
¡luego camina un rato mientras el látex se prepara y se
seca directamente en sus manos! Luego se quitan los guantes
y los tiran en la gran "caja de productos terminados"
y comienzan el proceso una vez más".
¡La mujer no se rió! Cinco minutos más tarde, durante el
procedimiento, tuvieron que parar la limpieza de
los dientes porque la mujer comenzó a reír.
La anciana se sonrojó y exclamó:
"de repente pensé en cómo deben hacer los condones