NO LE DES A TU HIJO TODO LO QUE QUIERE
No le des a tu hijo todo lo que quiere.
Te será difícil y doloroso, pero es lo mejor que puedes hacer por él.
Nunca olvides, que tan importante como alimentarlo y educarlo,
es que le enseñes a vivir valiéndose de sus propios medios.
Algún día no estarás a su lado para alcanzarle lo que necesite;
por eso, desde pequeño prepáralo para la vida.
Tu hijo debe disfrutar de su niñez con la inocencia propia de su edad,
recibiendo amor a raudales pero, a la vez, aprendiendo a su manera,
que en la vida no se puede tener todo lo que se quiere, y eso depende de ti.
Poco a poco, enséñale a cumplir sus deberes,
a defender sus derechos y a practicar el orden y la disciplina,
pero sin lastimarlo. Para eso Dios te hizo inteligente.
Acostúmbralo a controlar sus deseos y a resolver sus necesidades
conforme sea posible,
sin alterar la naturaleza de las cosas,ni ir por encima de nadie,
porque todo tiene su lugar y su tiempo.
Enséñale a esperar, a decir NO, y a respetar el NO de su prójimo.
A pesar de su corta edad,él irá asimilando todos tus consejos,
porque los niños, aunque no lo creas, lo entienden todo.
Juega con él hasta el cansancio,
recuerda que no podrás hacerlo por mucho tiempo;
pronto crecerá y tendrá otros intereses.
Mientras tanto, cuídalo, engríelo, guía sus pasos,
pero cuando se caiga, si no se ha herido, enséñale a levantarse solo.
Que Dios te ilumine para que, además de darle tu amor y tu tiempo,
sepas inculcarle que existe el hambre, la injusticia,
el dolor, la enfermedad y la muerte.
Si no lo haces, cuando crezca estará en desventaja ante los demás
y frente a la vida.
En su adolescencia, tendrás otras tareas que completarán su formación.
Pero si de niño le diste todo lo que quería, no podrás ayudarlo mucho.
Y ya de hombre, si logra superarse, vivirás orgulloso de sus éxitos;
pero si no, tendrás mucha culpa de lo que le pase.
¿ Autor ?...