La Alhambra es una ciudad palatina fortificada que
sirvió como residencia de la corte de los sultanes nazaríes. Se emplaza
en la parte más elevada de una colina que se alza en la margen
izquierda del río Darro, frente a la alcazaba del Albaycín en Granada.
Se recomienda acceder a la Alhambra por la Puerta de la Justicia,
emplazada en el lienzo sur de la muralla y realizada en el año 1348.
Desde aquí se llega a la Puerta del Vino, hoy aislada, y frente a cuya
fachada oriental se alza la alcazaba, obra de Muhammad I. La alcazaba
tiene planta rectangular irregular y consta de dos recintos: uno
exterior a modo de barbacana y otro interior, más elevado, fortificado
por altas torres entre las que destacan la del Homenaje y la de la
Vela. El interior de la alcazaba funcionaba como patio de armas.
Adosada al lado norte de la alcazaba encontramos la Puerta de las
Armas. La visita a la zona de palacios árabes se inicia por el mexuar,
estancia donde se reunía el consejo de visires. Desde aquí se pasa al
llamado Cuarto Dorado, palacio que fue muy reformado en época de
Fernando el Católico. La siguiente estancia es el Palacio de Comares
donde se ubica la famosa Torre de Comares y el patio de la Alberca o de
los Arrayanes, espacio de planta rectangular con una gran alberca en el
centro. En el pórtico norte encontramos la sala de la barca, adosada a
la Torre. En el ángulo entre los palacios de Comares y Leones se halla
el Baño Real, con tres partes claramente diferenciadas. El Palacio de
Leones se dispone en dirección este-oeste, ordenándose sus dependencias
en torno a un patio rectangular en cuyo centro se ubica la famosa
fuente de los leones. El patio está rodeado por pórticos en todos sus
lados, destacando los pabellones que avanzan hacia el jardín en sus
lados cortos. En estos laterales encontramos la sala de los Mocárabes y
la sala de los Reyes mientras que en los lados largos se hallan la sala
de las Dos Hermanas y la sala de los Abencerrajes. Al salir de la casa
Real Vieja encontramos el Partal, conjunto que corresponde al sultanato
de Muhammad III junto a la desaparecida mezquita aljama, espacio hoy
ocupado por la iglesia de Santa María de la Alhambra, diseñada por Juan
de Herrera en el siglo XVI. Anexo a los palacios nazaríes encontramos
el palacio de Carlos V, proyectado por Pedro Machuca. Eligió una planta
cuadrangular con un patio circular, tomando como referentes las ideas
renacentistas italianas de Alberti y Rafael.