En
tercer lugar, en España tenemos demasiadas normas innecesarias, sin
embargo, muchas leyes necesarias no existen, y cuando existen no se
cumplen y no ocurre nada. Las leyes de incompatibilidades son
sistemáticamente violadas; en numerosas CC AA no se regulan los
conflictos de interés; se crean empresas mixtas público-privadas para
otorgar contratos sin concurrencia a las empresas que se unen a la
pública, y tiene que ser la Unión Europea
la que nos lleve ante el Tribunal de Justicia Europeo. En fin, parece
que no nos tomamos muy en serio la prevención y la lucha contra la
corrupción y así nos va.
Sin
embargo, desde Transparencia Internacional creemos que no debemos
resignarnos, que es posible luchar contra la corrupción y ganarle la
batalla. Para ello, es ineludible que los partidos políticos y la
propia sociedad nos tomemos el problema en serio y propugnemos mejores
medidas y controles. En ese afán de contribuir a la movilización contra
esta enfermedad social, proponemos:
1.
Un reforzamiento de los mecanismos preventivos. Por ejemplo, realizar
análisis de riesgos en todas las Administraciones para detectar
peligros y anticiparse a ellos; formación mayor en ética, aplicar
rigurosamente las normas sobre conflictos de interés, etc...
2. Un reforzamiento de los mecanismos de mérito e igualdad en el acceso y carrera dentro de la Administración y una evaluación objetiva del rendimiento de nuestras Administraciones y empleados públicos.
3. Una mejora de los mecanismos de transparencia en la Administración;
tenemos muchos Gobiernos opacos que no rinden cuentas a la ciudadanía.
Es urgente una Ley de Transparencia y Acceso a la información, como
tienen casi todos los países europeos.
4. Una simplificación de las normas y procedimientos, permitiendo a los ciudadanos resolver sus asuntos con la Administración de forma más ágil: muchas licencias y permisos podrían concederse on line.
5.
Hay que modernizar y agilizar una justicia decimonónica y adaptar el
Código Penal a las nuevas realidades de la delincuencia económica y la
corrupción. Nuevos tipos penales deben ser generados para luchar contra
la corrupción, es necesario introducir la responsabilidad penal de las
personas jurídicas.
6. Una mejora de la Ley
de Financiación de los partidos, para prohibir las donaciones de
inmuebles, así como la condonación de deudas, etc. Sobre todo, es
necesario que se exija más transparencia a los partidos, que se
incorporen los datos de sus fundaciones y empresas al sistema de
control, y que se refuerce el papel del Tribunal de Cuentas.
7. Una
preocupación mayor por dar formación e información a la ciudadanía
sobre los enormes daños que causa a un país la corrupción. Deberíamos
incorporar a la educación reglada un análisis de la corrupción y sus
efectos. La sociedad civil debe implicarse en la lucha contra la
corrupción, liderada probablemente por los medios de comunicación.
8.
Una mejora de los mecanismos de denuncia de la corrupción con
protección a los denunciantes. Quien denuncia con fundamento la
corrupción no es un chivato, es una persona que actúa con lealtad institucional y social, y que merece nuestro agradecimiento.
9. Un reforzamiento de los mecanismos que permitan recuperar el dinero robado y dificultar el blanqueo del mismo.
10.
Una demostración por parte de los partidos políticos de que están
verdaderamente dispuestos a combatir la corrupción, para lo cual
deberían concertar un Pacto de Estado contra la corrupción, con medidas
concretas para su implantación, y facilitando a la sociedad el control
efectivo de su cumplimiento.
Finalmente,
creemos que resulta insostenible para nuestra economía y nuestra
democracia la situación actual, de ahí la llamada que hacemos a una
respuesta contundente y efectiva de la sociedad civil contra la
corrupción, una sociedad que no puede resignarse a esta degradación
moral y que debe exigir urgentemente de nuestros representantes una
respuesta consensuada y efectiva contra esta lacra social.
Jesús Lizcano Álvarez, Antonio Garrigues Walker, Jesús Sánchez Lambás y Manuel Villoria Mendieta integran el comité de dirección de Transparencia Internacional España.