MURILLO Y LA BELLEZA Y TERNURA DE SU PINTURA
MURILLO . Autorretrato 1670 . http://es.wikipedia.org/wiki/Bartolom%C3%A9_Esteban_Murillo
6:27
Murillo, un pintor al servicio de la fe
Murillo
es el pintor barroco que mejor representa el nuevo lenguaje de la fe, a
cuyo servicio puso su particular sensibilidad inclinada a valores
dulces y amables. Con una facilidad portentosa, creó una pintura serena
y apacible, como su propio carácter, en la que priman el equilibrio
compositivo y expresivo, y la delicadeza y el candor de sus modelos,
nunca conmovidos por sentimientos extremos. Murillo nació en
Sevilla, donde pasó la mayor parte de su vida, en 1617, posiblemente en
los últimos días del año ya que fue bautizado el 1 de enero de 1618 en
la iglesia de la Magdalena. La situación económica de la familia
era bastante aceptable y el futuro pintor se criaría sin estrecheces.
Pero en cuestión de un año fallece el padre y la madre por lo que el
joven Bartolomé pasará al cuidado de su hermana Ana. Murillo
inicia su aprendizaje artístico con Juan del Castillo, en cuyo taller
permanecerá cinco años. Los primeros cuadros de Murillo están muy
influidos por el estilo del maestro, como se puede apreciar en la
Virgen del Rosario con santo Domingo. En 1645 Murillo recibe su
primer encargo de importancia. Se trata de la serie de trece lienzos
para el Claustro Chico del convento de San Francisco en Sevilla. En
estas obras muestra una notable influencia de Van Dyck, Tiziano y
Rubens, lo que hace pensar a algunos en un posible viaje a Madrid,
aunque no existe base documental para apoyar esta teoría. Este año
de 1645 será de gran importancia para el artista porque se casa el 26
de febrero. La elegida se llamaba Beatriz Cabrera y Villalobos, joven
sevillana de 22 años. En los 18 años que duró el matrimonio tuvieron
una amplia descendencia: un total de nueve hijos. El éxito
alcanzado con la serie del Claustro Chico -al aportar un estilo más
novedoso que los veteranos Herrera el Viejo o Zurbarán- motivará el
aumento del número de encargos. Por ello en 1646 ingresa en su taller
un joven aprendiz al tiempo que debe buscar una casa más amplia para
organizar un taller. La crisis económica que vive Sevilla en 1650
no impide que los encargos continúen a buen ritmo, siendo uno de los
más importantes el enorme lienzo de la Inmaculada Concepción para la
iglesia de los Franciscanos, llamada "La Grande" por su tamaño. En
1658 se traslada a Madrid, donde es muy probable que conociese a
Velázquez, quien le pondría en contacto con las colecciones reales,
donde tomaría contacto con la pintura flamenca y veneciana. A finales
de año, Murillo está de nuevo en Sevilla, apareciendo como vecino de la
parroquia de Santa Cruz donde permaneció hasta 1663, que se trasladaría
a la de San Bartolomé....
3:38
Durante
el reinado de Felipe IV la escuela española afirmó las cualidades de su
estilo y definió su personalidad, gracias fundamentalmente a los
grandes maestros del siglo: Velázquez, Ribera, Zurbarán y Murillo. Los
cuatro dominaron la producción pictórica de la época, eclipsando a sus
contemporáneos, a los que convirtieron en deudores de sus respectivos
estilos. Velázquez nace en Sevilla en 1599. Formado con Pacheco,
su primera etapa se caracteriza por una pintura naturalista inspirada
en Caravaggio. En 1623 viaja a Madrid e inicia su carrera de retratista
de corte, interesándose por la personalidad de sus modelos. El viaje a
Italia de 1629 le llevará a conocer la pintura del Renacimiento y
convertirse en un pintor reconocido, realizando los encargos más
importantes de su tiempo como la decoración de la Torre de la Parada o
el Palacio del Buen Retiro. En 1649 regresa a Italia donde culmina su
carrera recibiendo todo tipo de honores. De vuelta a España, el ocaso
de su vida nos depara sus mejores obras en las que anticipa la pintura
impresionista al interesarse por la luz y el color. Ribera
representa la pervivencia del naturalismo táctil y concreto, que se
había iniciado en las primeras décadas del siglo XVII y que con él
alcanzó su máxima expresión. Su estancia en Roma y Nápoles le permitirá
conocer las obras de Caravaggio, recibiendo un importante número de
encargos, haciéndose famos por el dramatismo que encierran sus
martirios. Con el transcurrir de los años, siguiendo la evolución del
siglo, olvidará o atenuará su tenebrismo para acercarse al estilo de
los Carracci. Las obras de estos años vendrán caracterizadas por el
colorismo y la difusa luminosidad, recordando a la Escuela veneciana.
En sus últimas obras recupera el estilo tenebrista que caracterizó sus
primeros momentos, consiguiendo imágenes llenas de vivacidad en las que
emplea una rebosante luminosidad al estilo de Tintoretto. La
principal aportación de Zurbarán a la pintura española del Barroco será
el reflejo de la vida, las creencias y las aspiraciones de los
ambientes monásticos, para los que el pintor realizó prácticamente toda
su obra. Su estilo se mantuvo prácticamente invariable, desarrollando
el naturalismo tenebrista para crear escenas cargadas de verosimilitud,
en la que los santos se presentan ante el espectador de la manera más
realista. Por esta razón Zurbarán es el pintor de los hábitos. Esta
inmovilidad fue durante varias décadas el secreto de su éxito, pero
terminó por condenar su carrera artística ya que el cambio de gustos en
la mitad del siglo XVII y el triunfo de la pintura de Murillo harán
fracasar su próspero taller. Murillo es quien mejor representa el
nuevo lenguaje de la fe, a cuyo servicio puso su particular
sensibilidad inclinada a valores dulces y amables. Con una facilidad
portentosa creó una pintura serena y apacible, como su propio carácter,
en la que priman el equilibrio compositivo y expresivo, y la delicadeza
y el candor de sus modelos, nunca conmovidos por sentimientos extremos.
Colorista excelente y buen dibujante, Murillo concibe sus cuadros con
un fino sentido de la belleza y con armoniosa mesura, lejos del
dinamismo de Rubens o de la teatralidad italiana
FUENTE : artehistoria.com
9:59Gonzalo Sebastián de Erice. Hablemos de Murillo.
Apasionado
de Murillo , descubre anécdotas interesantes de la vida y obra de
Murillo . También manifiesta su repulasa por Velázquez y su pintura (
Cuestión de gustos y de opiniones ) .
4:29
Gonzalo Sebastián de Erice. El botín Napoleón.
Reivindica
la devolución de la pintura española robada por el Marsical francés
Soult , cuando los ejércitos napoleónicos invaden España .EL MARISCAL FRANCÉS SOULT . UN APASIONADO DEL ARTE Y UN EXPLOLIADOR DE LA PINTURA ESPAÑOLA . Duque de Dalmacia , sometió Madrid al ejército napoleónico .
LA INMACULADA DE SOULT . BARTOLOMÉ ESTEBAN MURILLO .
Se
la conoce con esta denominación por el mariscal francés Soult que la
rapiñó , juntos con otros cuadros de Zurbarán y Murillo , cuando los
ejércitos napoleónicos invadieron España . Este ilustrado general
gabacho , era un apasionado del arte y quedó prendado con la gracia y
frescura que reflejaba el pintor sevillano en sus obras y se dedicó a
robarlas y enviarlas a Francia .
Vendedores de fruta (1670)
|
|
|
|
La Virgen del Rosario con el Niño
|
|
|
|
|
Inmaculada, Museo del Prado
|
San Fracisco Solano, Alcazar, Sevilla
|
|
|