El europeo más viejo de la historia vivió en la sierra de
Atapuerca hace 1,2 millones de años, un dato sobre el que los
científicos ya estaban trabajando pero que ha corroborado el hallazgo
de su mandíbula en el yacimiento de la provincia española de Burgos.
La
mandíbula conserva algunos dientes y a ella corresponde además un
segundo premolar inferior que fue encontrado dos días antes. Este
descubrimiento hace retroceder en casi medio millón de años la llegada
de los primeros homínidos a Europa.
La revista "Nature" publica
en su último número las principales conclusiones del nuevo
descubrimiento del equipo investigador de Atapuerca, dirigido por Juan
Luis Arsuaga, José María Bermúdez y Eudald Carbonell, y que se produjo
el 30 de junio del 2007.