¿POR QUÉ ASESINARON A Trotski?
¿ Era un símbolo para la clase obrera ?
Lev Davídovich Bronstein " LEON TROTSKI "
Лев Давидович Бронштейн
( 1879 - 1940 ) .
TROTSKI ( ASESINADO )
TROTSKI ( EL ASESINADO ) STALIN ( EL QUE ORDENñO SU ASESINATO )
RAMÓN MERCADER DEL RIO HERNÁNDEZ
( EL AUTOR MATERIAL DEL ASESINATO )
1914 -1978
ASÍ SUCEDIERON LOS HECHOS DE SU ASESINATO :
Stalin había dado orden de asesinar a Trotsky y, Jotov, encargado de las operaciones contra éste en México, se valió de dos comunistas catalanes, Caridad y Ramón Mercader Vicente Lombardo Toledano y David Alfaro Siqueiros. (madre e hijo), para llevar a cabo el plan. Asimismo, ayudaron dos mexicanos de izquierda,
Aunque el palacete en el que vivía estaba fuertemente custodiado, Ramón Mercader (conocido con el alias de Jaques Mornard)
lograría infiltrarse en su círculo ganándose la confianza de una de las
secretarias de Trotsky, Silvia Ageloff, con la que incluso mantuvo un
noviazgo formal premeditado y planeado para perpetrar el magnicidio. Con el pretexto de que leyera un escrito suyo se acercó a Trotsky y mientras este leía le clavó salvajemente un piolet
en la cabeza. Al grito de Trotsky se escuchó un estruendo en toda la
casa , acudiendo rapidamente sus custodios , pero no se pudo hacer nada
.
León Trotsky moriría un día más tarde en un hospital de la Cruz Verde.
Cabe señalar que a sus exequias, asistieron cerca de trescientas mil
personas, en una ciudad que por aquel entonces apenas contaba con unos
cuatro millones de habitantes.
RAMÓN MERCADER . EL ASESINO MATERIAL DE TROTSKI .
Miembro del Partido Socialista Unificado de Cataluña (PSUC), participó en la Guerra Civil Española, en la cual ingresó en los Servicios Secretos Soviéticos. Infiltrado en los círculos trotskistas en París, la NKVD le asignó la misión de ejecutar a León Trotsky por medio millón de dólares.
Llegó a México en 1939 bajo la identidad falsa de Frank Jackson,
un rico comerciante canadiense que hablaba francés e inglés, pero no
español. Trotsky estaba muy custodiado. Sabía que Stalin buscaba su
muerte y el 24 de mayo de 1940 había sufrido un ruidoso atentado
dirigido por el famoso muralista David Alfaro Siqueiros.
Al fracasar este atentado, Mercader entró en acción. Había conquistado
a una de las secretarias privadas, Sylvia Agelof, y después de varios
meses de relación logró acceder al círculo de confianza de Trotsky,
llegando incluso a regalar bombones a la esposa de éste, Natasha.
Mercader lentamente se ganó la confianza de Trotsky, hasta que en la
mañana del 20 de agosto de 1940 fue recibido a solas por el dirigente
comunista. Mercader supuestamente le traía unos escritos. Trotsky se
acercó a la ventana con el objeto de leer mejor y en ese instante
Mercader le descargó un feroz golpe de piolet
en la cabeza, enterrando profundamente la herramienta en el cráneo de
Trotsky. Aun así, Trotsky no pereció instantáneamente y sobrevivió
entre espasmos y convulsiones por unas 12 horas más antes de fallecer.
Sylvia Agelof, al conocer la verdadera naturaleza del interés de Ramón,
intentó suicidarse. La casa donde esto sucedió está ubicada en el
barrio de Coyoacán de la Ciudad de México.
Detenido por los guardias de Trotsky y las autoridades mexicanas, fue condenado por asesinato a veinte años de prisión. Stalin
en los primeros momentos no fue relacionado con el asesinato y no le
importó la suerte corrida por Mercader. En principio, la declaración de
Mercader fue que tenía problemas personales con Trotsky.
En agosto de 1953 se supo su verdadera identidad. Salió de la cárcel en 1960, fijó su residencia en la URSS, más tarde, desilusionado de la desestalinización, se radicó en Checoslovaquia y después en Cuba, donde estaba su madre, Caridad, quien también había sido militante de la NKVD. En la KGB llegó a coronel y fue condecorado en secreto como Héroe de la Unión Soviética,
la más alta distinción soviética. Pasó sus últimos años viviendo entre
Moscú y La Habana, donde murió de cáncer en 1978. Está enterrado en el
cementerio moscovita Kuntsevo, reservado a Héroes de la Unión
Soviética, bajo un nombre falso 'Ramon Ivanovich Lopez' (Рамон Иванович
Лопес), cerca de las cenizas del famoso agente doble Kim Philby. También tiene un lugar de honor en el museo del KGB de Moscú.
Existe una película-documental sobre Ramón Mercader, Asaltar los cielos,
de 1996, dirigida por José Luis López Linares y Javier Rioyo. Antes de
tratar la figura de Ramón Mercader, trata la de su madre, Caridad, hija
de un rico industrial que tuvo gran influencia en la militancia de
izquierdas de Ramón y sus hermanos. Como detalle humano, decía Ramón
Mercader a un amigo muchos años después del crimen: "ese grito, ese
grito...", refiriéndose al que profirió Trotsky al hundirle el piolet.
LAS TRAICIONES DE TROTSKI :
"Trotski,
en sus últimos años, defendió muchas posiciones oportunistas tales como
la política de "entrismo" en la socialdemocracia, el frente único
obrero, etc., posiciones criticadas, con toda la razón, por la
Izquierda comunista en los años 30. Trotski, sin embargo, nunca se pasó
al campo enemigo, el campo de la burguesía, como sí lo han hecho los
trotskistas después de su muerte. Sobre la cuestión de la guerra
imperialista, muy especialmente, defendió hasta el final la postura
tradicional del movimiento revolucionario: transformación de la guerra
imperialista en guerra civil ".
IÓSIF STALIN . ( 1878 - 1953 ) .
Иосиф Сталин
http://www.biografiasyvidas.com/biografia/s/stalin.htm
Stalin en una entrevista.
"Stalin,
para asentar su poder y desarrollar la política que lo convirtió en
principal promotor de la contrarrevolución, fue eliminando primero,
enviándolos a los campos, a cantidad de revolucionarios, antiguos
bolcheviques, especialmente a quienes habían sido compañeros de Lenin,
los protagonistas de la Revolución de Octubre. Pero eso no bastaba. Con
el incremento de las tensiones guerreras a finales de los años 30,
Stalin necesitaba tener las manos totalmente libres, en el interior,
para desarrollar su política imperialista. En 1936, al comienzo de la
guerra de España, hubo primero el juicio y la ejecución de Zinoviev,
Kamenev y Smirnov , luego el que acabó con la vida de Piatakov, Radek y, en fin, el juicio
del llamado grupo Rikov-Bujarin-Kretinski. Sin embargo, el bolchevique
más peligroso, aunque estuviera en el exterior, seguía siendo Trotski.
Stalin ya lo había dañado cuando mandó asesinar en 1938 a su hijo León
Sedov en París. Ahora tenía que liquidar al propio Trotski.
Aunque la liquidación de los últimos bolcheviques se debía en primer
lugar a las necesidades de la política de Stalin, también era una
respuesta a las de toda la burguesía mundial. Por eso, el destino de
León Troski quedó desde entonces sellado. Para la clase capitalista del
mundo entero, Trotski, símbolo de la Revolución de Octubre, debía
desaparecer.
TROTSKI sabía perfectamente que sus días estaban contados. Su eliminación
tenía un significado mucho mayor que la de los demás viejos
bolcheviques y de los miembros de la Izquierda comunista rusa. El
asesinato de los viejos bolcheviques había servido para fortalecer el
poder absoluto de Stalin. El de Trostski vino además a significar que
para la burguesía mundial, incluida la rusa, era necesario ir hacia la
guerra mundial sin estorbos. El camino quedó perfectamente despejado
tras la desaparición de la última gran figura de la Revolución de
Octubre, del más célebre de los internacionalistas. Ese fue el
resultado de la gran eficacia del aparato de la GPU que Stalin utilizó
para liquidarlo. Hubo varias intentonas que se fueron acercando en el
tiempo. Nada parecía poder contener la maquinaria estalinista. Poco
antes de que lo asesinaran, Trotski ya había sufrido un ataque nocturno
por parte de un comando el 24 de mayo de 1939. Los esbirros de Stalin
habían logrado instalar ametralladoras en las ventanas de enfrente de
su casa. Llegaron a disparar entre 200 y 300 tiros y unas cuantas
bombas incendiarias. Por fortuna, las ventanas eran altas y Trostki,
Natalia su mujer y Sieva su nieto pudieron escapar de milagro
protegiéndose bajo las camas. La intentona siguiente fue la buena. Fue
la realizada por Ramón Mercader con su pico.( Cuando Trotski residía ya
en México )".
MOMIA DE LENIN EN SU MAUSOLEO EN LA PLAZA ROJA DE
MOSCÚ .
Vladímir Ilich Lenin Владимир Ильич Ленин
( 1870 -1924 ) .
" Sin embargo, para la burguesía, el asesinato de Trotski no era suficiente. Como lo había escrito justamente Lenin en El Estado y la revolución: "En
vida de los grandes revolucionarios, las clases opresoras les someten a
constantes persecuciones, acogen sus doctrinas con la rabia más
salvaje, con el odio más furioso, con la campaña más desenfrenada de
mentiras y calumnias. Después de su muerte, se intenta convertirlos en
iconos inofensivos, canonizarlos, por decirlo así, rodear sus nombres
de una cierta aureola de gloria para "consolar" y engañar a las clases
oprimidas, castrando el contenido de su doctrina revolucionaria,
mellando el filo revolucionario de ésta (…) Olvidan,
relegan a un segundo plano, tergiversan el aspecto revolucionario de
esta doctrina, su espíritu revolucionario. Hacen pasar a primer plano,
ensalzan lo que es o parece ser aceptable para la burguesía."
"En lo que a Trotski se refiere son quienes pretender ser sus
continuadores, aquellos que se reivindican de su herencia, los
trotskistas, los que, tras su muerte, han asumido esa sucia labor. Ha
sido basándose en sus posiciones oportunistas con lo que han
justificado todas las guerras nacionales desde el final de la IIª
Guerra mundial y con lo que se hicieron defensores de un campo
imperialista, el de la URSS ".
La perspectiva para Trotski era que el proletariado en armas iba a
derribar el capitalismo, tanto más porque, según él, la guerra iba a
crear las condiciones favorables para una insurrección proletaria como
había ocurrido con la Iª Guerra mundial.
“La guerra actual, y lo hemos dicho en múltiples ocasiones, no es
sino la continuación de la última guerra. Pero continuación no es
repetición. (…) Nuestra política, la política del
proletariado revolucionario respecto a la segunda guerra imperialista
es una continuación de la política elaborada durante la primera guerra
imperialista, sobre todo bajo la dirección de Lenin”
“Es esta perspectiva, (la revolución) la que debe ser la
base de nuestra agitación. No se trata solo de tener una posición sobre
el militarismo capitalista y negarse a defender el Estado burgués, sino
de prepararse directamente para la toma del poder y la defensa de la
patria socialista…”
"Parece claro que Trotski andaba totalmente desorientado cuando creía
que el curso histórico era el de la revolución proletaria. No tenía una
visión correcta de la situación de la clase obrera y de la relación de
fuerzas entre ella y la burguesía. Únicamente la Izquierda comunista
fue capaz de demostrar que, en los años 30, la humanidad estaba
viviendo un período de profunda contrarrevolución, que el proletariado
había sido derrotado y que solamente la “solución” de la burguesía, la
guerra imperialista mundial, era entonces posible ".
"A pesar de su jerigonza “militarista”, que lo hizo deslizarse hacia el
oportunismo, Trotski se mantuvo con firmeza en una postura
internacionalista. Pero, con aquello de querer ser “concreto” (como
intentaba serlo en las luchas obreras con lo del programa de transición
y en el ejército con su política militar) para ganarse a las masas
obreras para la revolución, acabó alejándose de la visión clásica del
marxismo y defendiendo una política opuesta a los intereses del
proletariado. Esa política, que pretendía ser muy táctica era, de
hecho, muy peligrosa pues tendía a encadenar a los proletarios al carro
del Estado burgués y a hacerles creer que podrían existir buenas
soluciones burguesas. En la guerra, esa táctica tan “sutil” será puesta
en práctica por los trotskistas para justificar lo injustificable y,
especialmente, su adhesión a la burguesía a través de la defensa de la
nación y de la participación en la “Resistencia”.
" El programa de transición y la PMP fueron orientaciones políticas de
Trotski que, desde un punto de vista de clase, acabaron en un fracaso.
No sólo no hubo revolución proletaria al término de la IIª Guerra
mundial, sino que además la PMP permitió a la IVª Internacional
encontrar una justificación a su participación en la carnicería
imperialista generalizada, transformando a sus militantes en buenos
soldados de la “democracia” y del estalinismo. Fue entonces cuando el
trotskismo se pasó irremediablemente al campo enemigo .
Está claro que la debilidad más grave de Trotski fue no haber
comprendido que el curso histórico era hacia la contrarrevolución y,
por consiguiente, hacia la guerra mundial como así lo dejó claramente
expuesto la Izquierda comunista italiana.
En cuanto a España: “Los obreros del mundo entero esperan ardientemente la nueva victoria del proletariado español”
Cometía así un enorme error político, haciendo creer a la clase obrera
que lo que estaba ocurriendo entonces, especialmente en Francia y
España, iba en el sentido de la revolución proletaria, cuando, en
realidad, la situación mundial iba en sentido opuesto .
Desde su expulsión de la URSS en 1929 hasta su asesinato, Trotski
no paró de interpretar el mundo al revés. Mientras que la tarea del
momento consistía en agrupar las energías revolucionarias
supervivientes de la derrota para acometer ante todo un balance político
completo de la ola revolucionaria, un obcecado Trotski se las ingenió
para ver al proletariado siempre en marcha, cuando, en realidad, estaba
derrotado. Por eso la IVª Internacional, creada hace más de 50 años
sólo fue una cáscara vacía en la que nunca podría haberse desarrollado
el movimiento real de la clase obrera, por la sencilla y trágica razón
de que estaba en el pleno reflujo de la contrarrevolución. Toda la
acción de Trotski, basada en ese error, contribuyó a dispersar más
todavía las ya tan débiles fuerzas revolucionarias presentes en el
mundo en los años 30 y, peor todavía, a arrastrar a la mayor parte al
lodazal capitalista del apoyo ‘crítico’ a los gobiernos de tipo ‘Frente
popular’ y de participación en la guerra imperialista .".
LOS GRAVES ERRORES DE TROTSKI :
Su particular posición sobre la naturaleza de la URSS. Criticó y
arremetió contra el estalinismo, pero siguió considerando a la URSS
como “patria del socialismo” o, como mínimo, “Estado obrero
degenerado”. Pero todos esos errores políticos, por muchas
consecuencias dramáticas que hayan tenido, no lo convirtieron en
enemigo de la clase obrera, mientras que sus “herederos” sí que
acabaron siéndolo después de su muerte. Trotski fue incluso capaz, a la
luz de lo ocurrido al iniciarse la guerra, de admitir que tenía que
revisar y, sin duda, modificar sus análisis políticos, especialmente en
lo que a la URSS se refiere.
“Nos hemos apartado mucho de la discusión sobre cómo denominar el
Estado soviético. No protesten nuestros críticos, sin embargo: sólo
situándose con la perspectiva histórica necesaria se podrá formular un
juicio correcto sobre un problema como el de la sustitución de un
régimen social por otro. La alternativa histórica llevada hasta su
término, se presenta así: o el régimen estalinista no es más que un
paréntesis abominable en el proceso de transformación de la sociedad
burguesa en sociedad socialista, o el régimen estalinista es la primera
etapa de una nueva sociedad de explotación. Si este segundo pronóstico
se confirma, entonces, claro está, la burocracia sería una nueva clase
explotadora. Por muy terrible que sea esta segunda posibilidad, si el
proletariado mundial aparece efectivamente incapaz de cumplir con la
misión que la historia le ha confiado, ya sólo cabría reconocer que el
programa socialista, construido sobre las contradicciones internas de
la sociedad capitalista, sería finalmente una utopía. Es evidente que
se necesitaría entonces un nuevo “programa mínimo” para defender los
intereses de los esclavos de la sociedad burocrática totalitaria.”
Haciendo abstracción de la visión en perspectiva que Trotski
desarrollaba en ese momento, visión reveladora de un gran desánimo,
cuando no de una profunda desmoralización, que parece hacerle perder
toda confianza en la clase obrera y en su capacidad para asumir
históricamente la perspectiva revolucionaria, está claro que Trotski
está iniciando ahí una puesta en entredicho de sus posiciones sobre la
naturaleza “socialista” de la URSS y sobre el carácter “obrero” de la
burocracia.
“No cambiamos de orientación, pero supongamos que Hitler dé la
vuelta a su armamento e invada los territorios del Este ocupados por el
Ejército rojo. (…) A la vez que con las armas en la mano
asestarán sus golpes contra Hitler, los bolcheviques-leninistas
realizarán una propaganda contra Stalin, para así preparar su derribo
en la etapa siguiente...”
( LA URSS EN LA GUERRA ) .
Trotski fue asesinado bastante antes de que terminara la guerra; Rusia
se encontró en el campo de los vencedores junto a los países llamados
“democráticos”. Como Trotski tenía previsto hacer, esas condiciones
históricas exigían a quienes se pretendían sus fieles continuadores,
una revisión de su posición en la dirección apropiada, o sea, como él
decía: “establecer retrospectivamente que, en sus rasgos fundamentales, la URSS actual es la precursora de un nuevo régimen de explotación a escala internacional”.
No sólo se negó a hacerlo la IVª Internacional, sino que, además, se
pasó con armas y equipo a las filas de la burguesía. Sólo algunos
elementos salidos del trotskismo pudieron mantenerse en el campo
revolucionario, como quienes formaron el grupo chino que publicó en
1941 El Internacionalista; los miembros de la sección española de la IVª Internacional con G. Munis; los Revolutionären Kommunisten Deutschlands (RKD); el grupo Socialisme ou Barbarie en Francia; Agis Stinas en Grecia o Natalia Trotski.
Fiel al espíritu de quien había sido su
compañero en la vida y en la lucha por la revolución, Natalia, en una
carta de 9 de mayo de 1951 dirigida al Comité ejecutivo de la IVª
Internacional, volvía e insistía muy especialmente sobre la naturaleza
contrarrevolucionaria de la URSS: “Obsesionados por fórmulas
viejas y superadas, seguís considerando al Estado estalinista como un
Estado obrero. Ni puedo ni quiero seguiros en ese punto. (…) Debería
quedar claro para cada uno que la revolución ha sido totalmente
destruida por el estalinismo. Y sin embargo, vosotros seguís diciendo
que bajo ese régimen monstruoso, Rusia seguiría siendo un Estado
obrero.”
Sacando todas las consecuencias de esa tan clara toma de posición, así proseguía ella muy justamente: “Lo
más insoportable de todo es la posición sobre la guerra en la que os
habéis comprometido. La tercera guerra mundial que amenaza a la
humanidad pone al movimiento revolucionario ante los problemas más
difíciles, las situaciones más complejas, las decisiones más graves. (…) Pero
frente a los acontecimientos de los años recientes, seguís preconizando
la defensa del Estado estalinista y comprometiendo a todo el movimiento
obrero en ella. Incluso ahora apoyáis a los ejércitos del estalinismo
en la guerra a la que está sometido el mártir pueblo coreano”.
Y concluía con valeroso temple: “Ni quiero ni puedo seguiros sobre ese punto (...) No
hay más remedio que anunciaros que no me queda otra solución sino la de
decir abiertamente que nuestros desacuerdos ya no me permiten quedarme
durante más tiempo en vuestras filas”
LOS TROTSKISTAS HOY :
"Como
lo afirma Natalia, los trotskistas ni siguieron a Trotski ni revisaron
sus posiciones políticas tras la victoria de la URSS en el segundo
conflicto mundial. Pero además, las únicas discusiones o planteamientos
para esclarecerse o profundizar (eso cuando se producen en su seno) se
refieren al tema de la "política militar proletaria" Esas discusiones siguen manteniendo el silencio
sobre cuestiones fundamentales como la de la naturaleza de la URSS o la
del internacionalismo proletario y del derrotismo revolucionario frente
a la guerra. En medio de una jerigonza pseudocientífica, y dándole
vueltas al asunto, Pierre Broué lo reconoce: “Es en efecto
indiscutible que la ausencia de discusiones y de balance sobre esa
cuestión (la PMP) ha sido un gran peso en la historia de la IVª
Internacional. Un análisis en profundidad, pondría de relieve esa
ausencia como origen de la crisis que empezó a zarandearla en los
años‑50”
Las
organizaciones trotskistas traicionaron y se cambiaron de campo, así
son las cosas, por mucho que los historiadores trotskistas, como Pierre
Broué o Sam Levy den vueltas y más vueltas para ahogar la cuestión
hablando de simple crisis de su movimiento: “La crisis fundamental
del trotskismo surgió de la confusión e incapacidad para comprender la
guerra y el mundo de la inmediata posguerra”
Es
cierto que el trotskismo no comprendió la guerra ni el mundo de la
inmediata posguerra, pero es precisamente por eso por lo que traicionó
a la clase obrera y al internacionalismo proletario apoyando a un campo
imperialista contra el otro en la IIª Guerra mundial. Desde entonces no
ha cesado de apoyar a los pequeños imperialismos contra los grandes en
las numerosas luchas llamadas de liberación nacional y otras luchas de
“pueblos oprimidos”. Pierre Broué, Sam Levy y demás, quizás no se hayan
enterado, pero el trotskismo murió para la clase obrera; y, como
posible instrumento de emancipación de dicha clase, no hay para él
resurrección posible. De nada les sirve a los trotskistas pretender
recuperar a los verdaderos internacionalistas y, en particular, la
labor de la Izquierda comunista italiana durante la guerra, como así
intentan hacerlo los Cahiers Leon Trotsky en ese mismo número
39 (páginas 36 y siguientes) ¡Un poco de decencia, señores! ¿Cómo se
atreven a mezclar a los internacionalistas de la Izquierda comunista
italiana con la IVª Internacional patriotera y traidora a la clase
obrera? Nosotros, Izquierda comunista, no tenemos nada que ver con la
IVª Internacional y todas sus actuales reencarnaciones ".
1-http://es.internationalism.org/Rint103/05.htm
EL ASESINATO DE TROTSKI EN 1940 . CORRIENTE COMUNISTA INTERNACIONAL .
2-http://es.wikipedia.org/wiki/Le%C3%B3n_Trotsky
LEÓN TROTSKI .
3-http://www.biografiasyvidas.com/biografia/s/stalin.htm
STALIN . BIOGRAFIAS Y VIDAS .
4-http://es.wikipedia.org/wiki/Lenin
LENIN .
5-http://es.wikipedia.org/wiki/Ram%C3%B3n_Mercader
RAMÓN MERCADER DEL RIO HERNÁNDEZ .