La historia del boxeo es realmente extensa y por tal razón os remontamos a 1908, un siglo atrás. Allí, John Arthur Johnson, mejor conocido como Jack Johnson, se proclamó como el primer campeón de los pesos pesados de raza negra.
Johnson tuvo que esperar hasta 1908 para poder combatir por el título mundial, ya que la discriminación existente en los Estados Unidos le impedía participar con boxeadores de raza blanca.
Cuando tuvo la posibilidad de enfrentarse al canadiense Tommy Burns en Sydney, Australia, no lo desaprovechó. Johnson lo demolió en el ring y así levantaba la corona de los pesos pesados, que significaba la demostración de que los púgiles de raza negra podían ser campeones.
Finalmente Johnson tuvo que marcharse a Europa por pruebas dudosas de haber infringido la ley y allí pudo retener varias veces su título. Jack Johnson disputó su último combate en 1927. Su vida sirvió de argumento para La gran esperanza blanca (1968), drama de Howard Sackler que ganó el premio Pulitzer.