Desde
la vega del Codorno y su impresionante cueva natural vamos hacia
abruptos valles entre montañas y espectaculares vistas, hacia
Tragaceto. La sierra de las Majadas es un verdadero museo natural.
Formas caprichosas y pequeños pueblos. El río Jucar discurre por esta
zona con algunos pantanos que lo relentizan. Los paisajes se suavizan
según se sale de la serranía hacia Villado. La Ciudad Encantada formada
por la paciencia del tiempo y el agua. La hoz del río Huecar nos lleva
al pueblo de Palomera y después a Cuenca entre sus dos rios. El emblema
de la ciudad son las casas colgadas que acoge el museo de arte
contemporáneo. La catedral se sitúa frente al ayuntamiento. Ciudad
nueva y vieja se juntan para dar un resultado único.