Velázquez se formó en el taller de Francisco de Herrera el Viejo y en Italia y posteriormente fue pintor real, sus pinturas son algunas de las más brillantes del periodo barroco.
Pero, como todo genio ( lo mism le sucede a Leonardo Da Vinci ) , sus obras presentan ciertos rasgos enigmáticos en cuanto a su intención y significado. Y, entre ellas, quizá la más problemática sea Las Meninas, que representa, en una primera contemplación, a la Infanta Margarita de Austria junto a sus damas de compañía.
Pero ya la misma historia del cuadro resulta curiosa. En 1734, un incendio destruyó por completo el Alcázar de Madrid, por entonces residencia real, y la obra se salvó casi milagrosamente de las llamas. No obstante, lo que realmente preocupa a los expertos es interpretar el cuadro, es decir, descifrar el mensaje que trataba de mostrar el pintor.
La explicación más sencilla es la que lo presenta como una escena cotidiana de palacio. La Infanta visita al pintor, acompañada por sus meninas, para ver como trabaja. Uno de los personajes le ofrece una jarra de agua. Después, entran los Reyes y todos comienzan a reaccionar ante su presencia para hacer la pertinente genuflexión. Sería, por tanto, una muestra de realismo costumbrista.
Pero, a partir de esta primera interpretación sencilla, comienzan a sugerirse posibles mensajes simbólicos. El primero de ellos se basa en la presencia del pintor en el cuadro. Los estudiosos sugieren que Velázquez pretendía con ello reivindicar la nobleza de su arte incluyéndose en un retrato con los propios Reyes, a los que se ve, además en segundo plano.
Hay que recordar que, en el siglo XVII, excepto en Italia, la pintura no se consideraba un arte noble, sino un oficio de plebeyos más o menos brillante. Y, de ese modo, el pintor trataba de hacer valer su profesión.
Otra tesis sostiene que la forma destacada en que aparece la Infanta Margarita es una alusión política, ya que ésta era, en aquellos momentos, la única descendiente con opciones de heredar el trono. La presencia de los Reyes en una posición retrasada simbolizaría su apoyo y ejemplo a la infanta.
Pero la interpretación más singular es la que identifica la obra con una alegoría: la enana Mari Bárbola, que lleva una bolsa de dinero en la mano, sería la codicia; el enano Nicolasito que incordia al perro simbolizaría al mal molestando a la fidelidad.
Aunque Velázquez había estudiado el tema de la iconografía pictórica, la verdad es que esta última tesis nos parece, como mínimo, un tanto osada. Lo mejor, en cualquier caso, es quedarse con lo visible, que es una obra maestra de la pintura de todos los tiempos.
SALA XII DEL MUSEO DEL PRADO .
1-http://www.artehistoria.jcyl.es/v2/obras/3.htm LAS MENINAS . LA FAMILIA DE FELIPE IV / ARTEHISTORIA
2-http://www.quecomoquien.es/enigmas-en-torno-a-las-meninas-de-velazquez.html ENIGMAS EN TORNO A LAS MENINAS DE VELÁZQUEZ - LUÍS MARTÍNEZ GONZÁLEZ