Mi General. O mejor dicho, Julio:
Todos los militares recibimos o impartimos charlas de valores
militares. Hoy quiero, aunque sea en papel, impartirte una más. Quizá la
última para ti como militar.
Honor, que bonita palabra, y que difícil de definir. Yo voy a intentarlo.
Honor es defender y respetar nuestra Bandera, esa que juramos -aunque
tú, me imagino, prometiste- defender hasta derramar la ultima gota de
nuestra sangre, y que tu compañero teniente de Alcalde de Barcelona
ultrajó en el balcón del Ayuntamiento.
Honor es respetar al jefe supremo de nuestras Fuerzas Armadas, S.M.
el Rey, cuyo busto metieron en una caja tus compañeros del Ayuntamiento
de Barcelona; o cuyo retrato quitaron del lugar preferente que por ley
le corresponde; o cómo tus más cercanos compañeros de Zaragoza
humillaron tratando de quitar su honroso nombre de un polideportivo.
Honor es respetar la memoria de nuestros muchos camaradas asesinados
por la ETA, y con cuyos palmeros gobiernan tus compañeros de Navarra.
Honor es la divisa de nuestra querida Guardia Civil, a cuyos
miembros, tu compañero Alcalde de Cádiz, permitió, con una sonrisa en
sus labios, llamar "hijos de puta" en un acto publico.
Honor es la lágrima callada de las familias de nuestros camaradas
fallecidos en misiones internacionales, en las que tú, a pesar de llegar
a General, no tuviste la suerte de participar, ya que alguien debía
quedarse cuidando los despachos.
Honor es jugarse la vida contra piratas en aguas somalíes, aunque el
que tuviese potestad para ordenar actuar contra ellos prefiriera el
silencio, o quizás el diálogo.
Honor es morir en aguas del Atlántico, vistiendo el honrado uniforme
del nuestro querido Ejercito del Aire, del que tú has decidido
desprenderte para vestir la mas cómoda camisa vaquera.
En fin, el Honor es eso que cuando se pierde, ya no se recupera.
Quizás te parezca pretencioso que un pobre Capitán quiera dar hoy
esta lección de moral, pero que sepas que hacerlo ha sido para mi todo
un Honor.
No quiero acabar sin recordarte el lema que aprendí hace más de
treinta años en mi querida academia de Talarn, y que un político, como
tú eres ahora, ordenó quitar de nuestro monte Constampla:
A ESPAÑA SERVIR, HASTA MORIR.
Atentamente
TODA UNA LECCIÓN DE LO QUE DEBE SER EL HONOR DE UN MILITAR ESPAÑOL
Carta abierta de un Capitán de Infantería a José Julio Rodríguez
El Capitán de Infantería José María
Martín Corrochano escribe una carta abierta a José Julio Rodríguez, que
ha salido del Ejército para ir a Podemos.
http://www.libertaddigital.com/espana/2015-11-06/carta-abierta-de-un-capitan-de-infanteria-a-jose-julio-rodriguez-1276560960/