La Casa Cervantes en Vélez - Málaga
LA CASA CERVANTES .
Aquí se alojó Miguel de Cervantes en Vélez - Málaga cuando era recaudador de
impuestos para Felipe II .
Es una casa solariega del siglo XVI que se vincula a diferentes
acontecimientos histórico de la historia de la ciudad. En primer lugar, y
según la tradición popular, se hospedó D. Miguel de Cervantes Saavedra
en 1594, durante su estancia en la villa cuando era recaudador del
estado para la Gran Armada de Felipe II; en segundo lugar, en ella nació
en el siglo XVII el que fue obispo de Málaga Fray Alonso de Santo
Tomás, supuesto hijo ilegítimo del rey Felipe IV.
Presenta al exterior una hermosa fachada con grandes balcones y
cierros de forja y portada adintelada en sillares con elementos de
tradición gótica. Entrando en la puerta principal, pues cuenta con otra
para carruajes que aún se conserva, apreciamos un zaguán que nos
comunica con un bello patio cuadrado con galería de triple arcos de
medio punto y columnas de ladrillo.
141.000 maravedíes de Vélez-Málaga fueron los culpables de que Miguel de
Cervantes (Alcalá de Henares, 1547-Madrid, 1616) acabara entre rejas en
la Cárcel Real de Sevilla a principios de octubre de 1597. Por este
incumplimiento con Hacienda fue castigado con medio año de privación de
libertad
por algo parecido a la malversación de caudales públicos como
comisionado del cobro de varios atrasos de tercios y alcabalas para
Felipe II.
Según Fortes ( José Antonio Fortes Concejal de Cultura y Patrimonio de
Vélez
- Málaga ) , en la Sala Cervantes se puede conocer la vinculación y
relación del escritor con la ciudad de Vélez Málaga a través dos
aspectos: el real, donde se documenta la etapa que pasó Cervantes como
recaudador de impuestos en Vélez Málaga y sus problemas con las cuentas,
que le ocasionaron su entrada en prisión, lugar donde comienza a
escribir El Quijote; y la ficticia, a través del capítulo 41 de esta
obra magna de la literatura universal, donde se cuenta la historia de un
capitán secuestrado en Argel que intenta huir y regresar a España, y
desembarca en Vélez.
La situación del ex convicto Cervantes no era nada boyante cuando su
amigo, Agustín de Cetina, contador Real, le busca una misión
recaudatoria como las que anteriormente ya había llevado a cabo en la
provincia de Sevilla como cobrador de impuestos en la Carrera de las
Indias. En este caso, Cervantes acepta el cobro de atrasos reales en el
reino de Granada.
En toda su operación ha de pasar por varios municipios de la
provincia, con la vara alta de la Justicia Real, para hacerse con un
total de 2,5 millones de maravedíes de la época. Una pequeña fortuna
para la que encuentra también un avalista, Francisco Suárez Gasco.
Es el 26 de agosto de 1594 cuando sale de Madrid para cumplir con
este encargo en cincuenta días, a ocho leguas por jornada. Deberá ir a
cobrar a Granada, Loja y Alhama, Guadix, Baza, Motril, Salobreña y
Almuñécar. En Málaga tendrá que reclamar deudas en Ronda y Vélez Málaga,
a la postre su perdición en esta empresa.
Cervantes acepta el encargo pese a lo incordioso de la misión. En
ningún pueblo le esperará una fiesta al llegar cuando además cada día
que no cobre lo debido, el deudor corre a cargo de su salario de 550
maravedíes al día. A Vélez llegará, según cálculos aproximados, a
finales de septiembre de 1954, para cobrar un total de 277.040
maravedíes. En carta al Rey del 8 de octubre de aquel año, ya avisa,
elocuentemente, de que en este pueblo "está la tierra apretada", por lo
que decide ir a cobrar otros pagos en tanto luego realizará una segunda
vuelta para hacer efectiva la suma.
La celda que ocupó Cervantes en Algamasilla de Alba ( Ciudad Real ) en un
viejo caserón manchego ( Casa de Medrano ) , se supone que sirvió de prisió a
Miguel de Cervantes
Sobre mediados de este mes, recibe del recaudador de alcabalas local,
Francisco López de Vitoria, una letra de 130.000 maravedíes que días
después girará en Málaga. Corría el 21 de noviembre de 1594. Éste le
haría parte del pago del total con una letra a cobrar en Sevilla de
manos del mercader flamenco, Juan Leclerque. Del resto del abono de la
deuda de Vélez nunca se supo. 141.000 maravedíes que algunos estudiosos
de las cuentas reales acreditan que cobró en metálico y nunca aportó y
otros que defienden que no las recibió. Lo que sí está más que claro es
que nunca supo acreditar su cobro.
Con este descabalgue ya de antemano del total de la misión granadina,
Cervantes también se encuentra con que parte de lo cobrado lo ha puesto
en manos de un banquero sevillano de origen portugués llamado Simón
Freire de Lima que quiebra y que le deja otro descuadre de 251.000
maravedíes. Este montante ordenó recuperarlo Felipe II con un embargo el
7 de agosto de 1595. Si bien a Cervantes le seguía faltando la casi
mitad de lo de Vélez, esos 141.000 dichosos maravedíes.
Para rellenar ese
descubierto, y tras un tiempo de idas y venidas,
sofocones propios de la quiebra de Freire, logra dinero de allegados,
familia y amigos, que dejan su deuda en una cifra cercana a los 80.000.
Pues bien, sin el apoyo de su avalista primero Suárez Gasco, y con la
inmisericorde reclamación real de esta cantidad, su caso llega a
colocarle frente al cruel Gaspar de Vallejo, juez de la Audiencia de
Grados de Sevilla que le exige una fianza de nada menos que 2,5 millones
para salir de su aprieto. Sin dinero, ni apoyos para conseguir esta
suma, el más insigne autor de las letras castellanas se ve abocado a la
privación de libertad. ( 2 )
1-Casa Cervantes
2-Cervantes ajusta sus 'quijotianas' cuentas con Vélez-Málaga .
Francisco Mármol
3-Más de 1.500 personas han visitado la nueva Sala Cervantes en el
casco histórico de Vélez Málaga
4-Prisión de Cervantes