María: qué nombre más bello.
¿Quién te lo puso?, di.
Acaso vino del cielo
o te lo trajo un serafín.
Al pronunciarle, ¡oh, María!,
parece que sale el sol
inundando de alegría
todos los campos en flor.
!Qué bello!, cinco letras lo componen
que son cinco rosas de olor
que perfuman con su aroma
a este mundo pecador.
Al empezar a llamarte
con este nombre sin par.
me quedo maravillado
porque se pronuncia el mar.
Y es, como el mar, inmenso,
de gracia lleno tu ser
Ufffffffffffffff.. amigo me hicistes llorar
que belleza sin par. que maravilla gracias amigo. gracias por dejar tan bellas cosas a nuestra madre maria un besazo