Mi Gente Bella...
La indecisión, es una palabra que nos llena
de mucha incertidumbre y consiste en la
incapacidad que tenemos para evaluar
cualquier hecho en el que debamos tomar
una determinación o elegir un camino
entre varios que se nos ofrecen o adoptar
una decisión o resolver una cuestión.
Por la cantidad de indecisiones que vemos a
diario, la indecisión es casi el síntoma de
nuestro tiempo.
A veces la indecisión es nuestro peor
enemigo limitando nuestras opciones y
dejando pasar las mejores ocasiones.
Sin embargo existen momentos en los
que uno tiene las cosas bien claras.
Cada una de nuestras decisiones involucra
un anàlisis basado en la informaciòn que
tenemos a nuestro alcance, lo que es
crucial para disminuir la cuota de riesgo de
nuestras acciones, dada la responsabilidad
que debemos asumir sobre sus
consecuencias.
Dentro de la gama de decisiones posibles
estàn aquellas que tomamos una sola vez
y que resuelven asuntos rutinarios, como
ir a pasearal perro, ir al supermercado
entre otras. Este tipo de decisiones
involucran un riesgo menor, ya, que
por lo general manejamos gran cantidad
de información que no varía demasiado.
Algo muy distinto sucede con aquellas
decisiones sobre un caso especifìco.
Ellas presentan mayores desafios, ya
que implican un anàlisis màs exhaustivo
de los factores involucrados.
Por lo general, este tipo de decisiones
requiere que recopilemos la mayor
cantidad de informaciòn posible,
evaluemos riesgos, ventajas y
consecuencias, ademàs de asumir la
responsabilidad por los resultados que
genere, ya sean positivos o negativos.
Quien pretenda ver todo con claridad, antes
de decidir, nunca decide.
Sin embargo, la equivocación es parte
de la vida y aprovecharla nos hace crecer.
Hay una forma de transitar ese camino y
es decidirse e ir corrigiendo, poco a poco,
lo que no nos gusta.
Cuando se convive con una persona
indecisa, la última cosa que se debe hacer
es darle consejos.
Si decides en su lugar, te hará responsable
de las consecuencias. Otro error es,
reprochar su falta de acción, porque
esto agravará la imagen negativa que
tiene de sí mismo.
Facilitandole el diálogo le ayúdaremos a
expresar lo que lo frena y le impide
tomar una decisión; hacerlo caer en cuenta
de que lo que puede perder si no se decide.
Los indecisos suelen negarse a ver las
consecuencias de su indecisión.
Les deseo un gran dìa de muchos èxitos.
Que Dios los guie y los
proteja.
Irmelena...
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