Mi Gente Bella...
Al pasar los 50,60 y otros tanto años, piénso, que es la
edad más positiva en experiencias y vivencias de nosotros
como seres humano especialmente cuando
logramos aceptar vernos envejecer.
Los cambios no solamente se dan en el cuerpo mismo,
sino que también en la parte espiritual y el estatus social,
en esta época de la vida existen cambios muy radicales,
nuevas vivencias que en esta etapa de la vida llaman
la atención.
Uno comienza a descubrir nuevos caminos a cambiar
nuevos valores, se comienza a poner en duda las viejas
ideas y se cambian las viejas ideas por otras nuevas,
se descubren nuevos sentimientos, es el tiempo que las
personas pueden realizar sus sueños o simplemente
dejarlos definitivamente.
Llegar a la tercera edad es un hecho para la mayoría
de las personas. El paso del tiempo nos ayuda
a encarar la vida de otra forma. A fin de cuentas,
la madurez trae más serenidad, paciencia y
sabiduría; beneficios que sólo el tiempo puede ofrecer.
Al mismo tiempo, hay algo que no se puede
negar o esconder: el cuerpo siente la llegada
de la edad y reacciona al paso del tiempo,el
pelo blanqueciendo y las arrugas coronando
nuestras sienes. Hasta hoy, el
mundo científico no ha definido cuáles son los
mecanismos del envejecimiento, y mucho
menos ha obtenido una fórmula para la ansiada
juventud eterna.
Cuando se piensa en la ancianidad, la
relacionamos más que todo en lo físico,
en las limitaciones de un cuerpo cansado,
en las perdidas naturales de habilidades
que van en decadencia, la vista disminuye,
los músculos ya no responden igual y hasta
se piensa en problemas mentales.
.
Sin embargo no podemos negar que nadie
puede detener el trayecto hacia el envejecimiento.
Debemos aceptar que se llegará el momento
en que tendremos que otorgarles a nuestros
hijos la autoridad que antes tuvimos nosotros
como padres, y si nosotros lo hicimos sin
atropellar la dignidad de nuestros “viejos” si
no los abandonamos, si no los dejamos en el
último rincón de la casa, justo es que no lo
hagan con nosotros.
Aceptemos pues que nuestra época de plantar
es aquí y ahora, pero tendrá su final inexorablemente,
y el tiempo para cosechar lo que sembramos
se acerca a pasos agigantados nos guste o no.
Recordemos...Si se tiene un ideal en la vida,
un motivo para luchar un sueño por realizar se
tendrá una razón para vivir.
LLEGAR A LA TERCERA EDAD...ES UN
PRIVILEGIO...
Que tenga un extraordinario dia lleno de alegrias
y grandes realizaciones.
Irmleena...
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