Toque de Dios Arturo Quirós Lépiz
Cierta vez un hombre había dejado enfriar su relación con Dios. De joven hizo muchas cosas y era muy entregado pero con el tiempo y los problemas había dejado de tener esa pasión en su corazón y, sin darse cuenta, se había enfriado hasta llegar a ver a Dios como algo simple y normal como las nubes o el sol. Llegó incluso a pensar que bueno, probablemente Dios había sido una etapa de su vida y que las cosas eran diferentes ahora.
De camino al trabajo un día vió como las aves volaban y pensó en como aprenden a volar. Algo tan complicado y sin seguridad alguna mas que su instinto. Recordó entonces aquella frase de la Biblia donde se habla de las aves y como Dios les da de comer mientras ellas viven tranquilas. Se dió cuenta entonces
de que Dios siempre está ahí, en lo visible, en lo invisible, en lo que está al descubierto y en lo que está en lo oculto y que había sido el quien se había alejado, y Dios se encontraba en los rayos del sol o en la brisa que tocaba su piel, todas caricias del Padre celestial.
Ciertamente el camino de la fe es difícil, por eso se compara con una batalla, no debemos olvidar que cada vez que miramos al cielo, en todo nuestro alrededor y en cada cosa sencilla se encuentra Dios.
Su amigo y hermano Arturo
Un Dios tan grande como quieras Arturo Quirós Lépiz
Amadas y amados hermanos, Que la paz de Cristo resucitado esté con todos ustedes!!!
Ciertamente todos tenemos grandes necesidades pero tambien es cierto que todos tenemos grandes virtudes, grandes potenciales y grandes logros por alcanzar.
¿Entonces por que es que muchas personas pasan por la vida como una maceta de corredor? ¿Acaso Dios tiene preferencias y solo da sus dones a algunos seres que nacen y a otros no?
No mis amadas y amados, todos tenemos miles de cosas que podemos dar a los demás, grandes milagros muchas veces conformados por muchas pequeñas proezas diarias. Un hijo o hija con principios, decencia y fé es el típico ejemplo de como se necesitan muchos esfuerzos para un buen fruto.
Todo ese potencial se encuentra dentro de nosotros, almacenado y deshidratado. Solo espera del agua viva de nuestro Señor para poder crecer y dar mil por uno. En San Juan 11.25-26 Jesús nos dice que El es la resurección y la vida, y todo el que crea en El no morirá jamás, sin embargo termina el versículo con una pregunta : "¿Crees esto?".
Mis amadas y amados, Dios es tan grande como queramos verlo en nuestro diario y cotidiano
vivir, así como nosotros mismos somos tan fuertes como lo creamos.
La semilla está dentro de nosotros, no dejemos de regarla diariamente con oración y buenas obras por nuestro prójimo. El poder está, pues cosas mas grandes que las hechas por Cristo podemos hacer si tenemos fé en las palabras del Maestro.
Su amigo y hermano Arturo
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