QUIZÁ FUE HACE MUCHO TIEMPO,
EN LAS AURORAS DEL MUNDO,
CUANDO UN NIÑO HUMANO,
SOÑÓ POR PRIMERA VEZ ESTOS REINOS.
O MÁS PROBABLEMENTE,
FUE EL RETOÑO DE UN HADA
EL QUE SOÑÓ EL UNIVERSO ... Pierre Dubois
Tal vez la vida sea una infinidad de cuentos contados al mismo tiempo,con personajes entrecruzados,coincidencias y divergencias.Tal vez la vida es presenciar el cuento en el que nos tocó ser protagonistas y tratar de tomar las decisiones que lo hagan lo mejor posible.Tal vez la vida sea tratar de disfrutar todo lo que se pueda y hasta lo que no se pueda de ese cuento de hadas que es la vida ... Viento Nocturno
Il cielo, raggiunta lunità divenne chiaro.
La terra, raggiunta lunità, divenne tranquilla.
Gli spiriti, raggiunta lunità, divennero potenti.
Le valli, raggiunta lunità, divennero piene.
Tutte le creature, raggiunta lunità, divennero vive.
Magico è colui che apre gli occhi alla vita ...
Magico è colui che sorride al giorno ...
Magico è colui che crede ancora nei sogni ...
Magico è colui che vive ogni giorno come un giorno nuovo ...
Magico è colui che si addormenta con un sorriso ...
Magica è la vita che ogni giorno ti mette
alla prova e che ogni giorno ti sfida ...
El cielo,lograda la unidad se puso claro.
La tierra,lograda la unidad volvió tranquila.
Los espíritus,lograda la unidad tornaron poderosos.
Los valles,lograda la unidad volvieron llenos.
Todas las creaturas,lograda la unidad
se transformaron en vivas.
Mágico es el que le abre los ojos a la vida ...
Mágico es el que le sonríe al día ...
Mágico es el que cree todavía en los sueños ...
Mágico es el que vive cada día como un día nuevo ...
Mágico es el que se duerme con una sonrisa ...
Mágica es la vida que cada día te pone
a la prueba y que cada día te desafía
Las estatuas de los Dioses
Hermosas y vencidas soñáis,
vueltos los ciegos ojos hacia el cielo,
mirando las remotas edades
de titánicos hombres,
cuyo amor os daba ligeras guirnaldas
y la olorosa llama se alzaba
hacia la luz divina, su hermana celeste.
Reflejo de vuestra verdad, las criaturas
adictas y libres como el agua iban;
aún no había mordido la brillante maldad
sus cuerpos llenos de majestad y gracia.
En vosotros crecían y vosotros existíais;
la vida no era un delirio sombrío.
La miseria y la muerte futuras,
no pensadas aún, en vuestras manos
bajo un inofensivo sueño adormecían
sus venenosas flores bellas,
y una y otra vez el mismo amor tornaba
al pecho de los hombres,
como ave fiel que vuelve al nido
cuando el día, entre las altas ramas,
con apacible risa va entornando los ojos.
Eran tiempos heroicos y frágiles,
deshechos con vuestro poder como un sueño feliz.
Hoy yacéis, mutiladas y oscuras,
entre los grises jardines de las ciudades,
piedra inútil que el soplo celeste no anima,
abandonadas de la súplica y la humana esperanza.
La lluvia con la luz resbalan
sobre tanta muerte memorable,
mientras desfilan a lo lejos muchedumbres
que antaño impíamente desertaron
vuestros marmóreos altares,
santificados en la memoria del poeta.
Tal vez su fe os devuelva el cielo.
Mas no juzguéis por el rayo, la guerra o la plaga
una triste humanidad decaída;
impasibles reinad en el divino espacio.
Distraiga con su gracia el copero solícito
la cólera de vuestro poder que despierta.
En tanto el poeta, en la noche otoñal,
bajo el blanco embeleso lunático,
mira las ramas que el verdor abandona
nevarse de luz beatamente,
y sueña con vuestro trono de oro
y vuestra faz cegadora,
lejos de los hombres,
allá en la altura impenetrable.
Luis Cernuda