Mira a tu alrededor. ¿Qué ves? Mucho es un reflejo
de tus propias creencias y expectativas.
Todo lo que experimentas pasa primero por el
filtro de tu actitud ante la vida. Es por eso que
una persona puede ver belleza y oportunidades en
la misma situación en la que otra sólo
ve desesperación y falta de posibilidades.
Los defectos que ves en los demás son, de alguna
manera, también tuyos. Si así no fuera, no podrías
reconocerlos o comprenderlos. La belleza que ves
en los demás también está dentro de ti. Porque
la belleza no está únicamente en la persona u objeto
que se percibe, sino también en quien la percibe.
El mundo que te rodea es un espejo y, cuando
pones tu mejor cara frente a un espejo,
lo que ves te agrada. Ten la firme expectativa
de vivir en un mundo de belleza, bienestar
y oportunidades y allí es exactamente donde estarás.
( Dr. Rafael E. Vicens )