SÓLO... VIVIR
Yo sólo deseo
levantarme cada mañana
con la misma esperanza de ayer,
ser mejor
a través del espejo de mi alma;
sonreír como niña,
llorar y desahogar mi desaliento,
caer y levantarme,
equivocarme y corregir...
ayudar a los demás
y dar todo de mi.
Soñar con los colores del cielo
aunque en mis ojos brille el gris,
correr contra el viento,
sentir la libertad en el rostro,
cantar, bailar, sentirme viva;
decirles a los míos
cuánto los quiero,
agradecer a Dios
y pedir perdón...
encontrar mi camino.
Arrojar el miedo,
desaparecer el temor,
aprender en cada paso,
amar y ser amada;
imaginar que cada día es mejor
y que nada me detiene,
que mi alma vibra
y que mis emociones no mueren.
Ayudar por ayudar,
dar por dar...
y querer sólo por querer.
¡Sentir que vivo!
Cerrar los ojos ante el aire,
derramar lagrimas con la lluvia
...superar el dolor, ir viviendo;
nunca perder la fe,
siempre ser Yo misma,
detenerme en algún punto:
descansar y pensar
el porqué Dios me quiere aquí.
Encontrar mi misión en la vida,
buscar la paz, la verdad y compartirla,
no permitir el vivir por vivir...
hay que hallar la alegría de vivir:
y vivir sólo por querer vivir.