Un día como el de hoy, pero del año 1945, no conforme con el devastador ataque a Hiroshima, EEUU lanza una segunda bomba, esta vez sobre la ciudad japonesa de Nagasaki. El encargado del bombardeo sería el B-29 denominado “Bocks car”. La bomba lanzada, de nombre “Fat Man”, era un artefacto muy diferente del utilizado tres días antes. En este caso, el explosivo era Plutonio en lugar de Uranio 235, y el funcionamiento,(la forma como provocaba la reacción nuclear), también era distinto. Esta bomba tenía una potencia de 20 kilotones, muy superior a los 13 kilotones de la bomba lanzada sobre Hiroshima. Sin embargo, causó menos víctimas mortales ( unas 73.000 frente a las 150.000 anteriores). La causa fue la orografía del terreno. Mientras que Hiroshima es totalmente plana, Nagasaki se encuentra en una zona montañosa y las colinas actuaron como trincheras naturales, protegiendo amplias zonas de la ciudad de la onda expansiva. Seis días después, Japón se rendiría de manera incondicional. El propio Emperador Hirohito anunció por radio el fin de la Guerra. Esa misma noche un grupo de militares, contrarios a la rendición, intentaron un Golpe de Estado, que fracasó.