El 2014 nos depara muchas cosas nuevas.
Queremos brillar,
queremos ser mejores, queremos alcanzar el éxito…
y es verdad.
Cada uno en su corazón ya tiene lo que desea.
Feliz Año, amigos míos.
Visualicen siempre su buen porvenir,
que Dios otorga a todos lo que necesitan.