Página principal  |  Contacto  

Correo electrónico:

Contraseña:

Registrarse ahora!

¿Has olvidado tu contraseña?

LATINOS EN ITALIA
 
Novedades
  Únete ahora
  Panel de mensajes 
  Galería de imágenes 
 Archivos y documentos 
 Encuestas y Test 
  Lista de Participantes
 General 
 BIENVENID@S 
 ME PRESENTO 
 ITALIA/NOTIZIE 
 LEGGI/VITA ITALIANA 
 ESPAÑA 
 CERVANTES - DON QUIJOTE 
 ESCRITORES 
 El rincón de la poesía 
 EFEMÉRIDES ARGENTINAS 
 MARTÍN FIERRO 
 EL LUNFARDO 
 PATRIA MÍA 
 MATEANDO 
 CON HUMOR 
 FONDOS Y DIBUJOS 
 MUNDO MAGICO 
 EL ZODÍACO 
 ARRIVEDERCI 
 
 
  Herramientas
 
Ronda de mates entre amigos: Mateando en el año nuevo ...
Elegir otro panel de mensajes
Tema anterior  Tema siguiente
Respuesta  Mensaje 1 de 3 en el tema 
De: 2158Fenice  (Mensaje original) Enviado: 04/01/2014 07:10

                                                                                                                                                                                                                    

Foto: No te dejes engañar por mí, no te engañes con las máscaras que utilizo pues uso miles de ellas y ninguna soy yo. Fingir es un  arte que se ha transformado en una segunda naturaleza para mí, pero no te engañes.
Doy la impresión de que soy una persona segura, de que todo está bien y de que estoy en paz conmigo misma, que mi nombre es confianza y tranquilidad es mi lema. Que las aguas están calmas y estoy al mando sin necesitar a nadie. No te creas todo eso, por favor. Mi apariencia es tranquila y sin embargo es solo apariencia. Es una máscara superficial que cambia de acuerdo a la ocasión. Debajo de ella no hay tranquilidad ni calma, debajo de todo ello vive una parte de mí confusa, miedosa y abandonada, pero eso lo oculto porque no quiero que nadie lo vea.
Siento pánico ante la posibilidad de que mi parte débil quede expuesta y por eso mantengo mi rol, mi fachada de quien no se deja tocar para ocultarme de la mirada que pueda ver. Y esa mirada puede ser precisamente mi rescate, mi única salvación, y en el fondo de mí lo sé. Es lo único que puede empezar un proceso de auto rescate que me libere de los muros de la prisión que yo misma construí, de las barras y garras que yo misma tan sufridamente construyo. Pero no te digo nada de eso porque no me atrevo. Tengo miedo.
Tengo miedo de que tu mirada no venga acompañada de acogida, aceptación, amor. Tengo miedo de que me desprecies, que puedas deshacerte de mí más aún de lo que yo lo hago conmigo misma y con ello hacer que me sienta más herida. Tengo miedo de que si eso ocurre sienta que no valgo nada, y que el mundo lo vea y me rechace.
Entonces, sigo jugando mis juegos, mis juegos de fingimiento, y muestro una fachada de seguridad que oculta una niña temblando en mi interior. Continúo llevando mis máscaras, todas vacías, y mi vida se transforma en un campo de batalla. Mantengo contigo una conversación vacía y superficial, te digo muchas cosas que no tienen la menor importancia callando aquello que arde dentro de mí; pero no te engañes con este automatismo. Por favor, escucha con atención y escucha también eso que no te estoy diciendo y que desearía decir, aquello que necesito decir pero que no soy capaz de hacer. No me gusta esconderme, sinceramente no me gusta. Lo que realmente me gustaría es ser genuina, espontánea, yo misma.
Necesito ayuda y tu puedes ayudarme tomándome de la mano, aunque eso parezca lo último que yo parezca necesitar. Cada vez que me siento acogida y escuchada, cada vez que alguien intenta comprenderme demostrando aceptación dos alas nacen en mi corazón. Alas pequeñas y frágiles, pero alas. Con sensibilidad, afecto y comprensión me siento capaz. Esta tarea no es fácil para mi ni para quien quiera ayudarme, las ideas y creencias de que no valgo nada son muy antiguas y han creado muros fuertes, sin embargo existen actitudes y sentimientos más fuertes y poderosos que esos muros, y esa es mi salvación. Por favor, ayúdame a destruir estos muros con manos fuertes pero gentiles ya que hay puntos de mucho dolor.

Y ahora te preguntarás quien soy…

Soy una persona que convive contigo porque soy cada hombre, cada mujer, cada niño y cada niña, cada ser humano que te encuentras en tu diario caminar.

 Susy Stroke

No te dejes engañar por mí, no te engañes con las máscaras que utilizo pues uso miles de ellas y ninguna soy yo. Fingir es un arte que se ha transformado en una segunda naturaleza para mí, pero no te engañes.
Doy la impresión de que soy un
a persona segura, de que todo está bien y de que estoy en paz conmigo misma, que mi nombre es confianza y tranquilidad es mi lema. Que las aguas están calmas y estoy al mando sin necesitar a nadie. No te creas todo eso, por favor.
Mi apariencia es tranquila y sin embargo es solo apariencia. Es una máscara superficial que cambia de acuerdo a la ocasión. Debajo de ella no hay tranquilidad ni calma, debajo de todo ello vive una parte de mí confusa, miedosa y abandonada, pero eso lo oculto porque no quiero que nadie lo vea.

Siento pánico ante la posibilidad de que mi parte débil quede expuesta y por eso mantengo mi rol, mi fachada de quien no se deja tocar para ocultarme de la mirada que pueda ver. Y esa mirada puede ser precisamente mi rescate, mi única salvación, y en el fondo de mí lo sé. Es lo único que puede empezar un proceso de auto rescate que me libere de los muros de la prisión que yo misma construí, de las barras y garras que yo misma tan sufridamente construyo. Pero no te digo nada de eso porque no me atrevo. Tengo miedo.

Tengo miedo de que tu mirada no venga acompañada de acogida, aceptación, amor. Tengo miedo de que me desprecies, que puedas deshacerte de mí más aún de lo que yo lo hago conmigo misma y con ello hacer que me sienta más herida. Tengo miedo de que si eso ocurre sienta que no valgo nada, y que el mundo lo vea y me rechace.
Entonces, sigo jugando mis juegos, mis juegos de fingimiento, y muestro una fachada de seguridad que oculta una niña temblando en mi interior.
 
Continúo llevando mis máscaras, todas vacías, y mi vida se transforma en un campo de batalla. Mantengo contigo una conversación vacía y superficial, te digo muchas cosas que no tienen la menor importancia callando aquello que arde dentro de mí; pero no te engañes con este automatismo. Por favor, escucha con atención y escucha también eso que no te estoy diciendo y que desearía decir, aquello que necesito decir pero que no soy capaz de hacer. No me gusta esconderme, sinceramente no me gusta.
 
Lo que realmente me gustaría es ser genuina, espontánea, yo misma.
Necesito ayuda y tu puedes ayudarme tomándome de la mano, aunque eso parezca lo último que yo parezca necesitar. Cada vez que me siento acogida y escuchada, cada vez que alguien intenta comprenderme demostrando aceptación dos alas nacen en mi corazón. Alas pequeñas y frágiles, pero alas. Con sensibilidad, afecto y comprensión me siento capaz. Esta tarea no es fácil para mi ni para quien quiera ayudarme, las ideas y creencias de que no valgo nada son muy antiguas y han creado muros fuertes, sin embargo existen actitudes y sentimientos más fuertes y poderosos que esos muros, y esa es mi salvación. Por favor, ayúdame a destruir estos muros con manos fuertes pero gentiles ya que hay puntos de mucho dolor.

Y ahora te preguntarás quien soy …

Soy una persona que convive contigo porque soy cada hombre, cada mujer, cada niño y cada niña, cada ser humano que te encuentras en tu diario caminar.

Susy Stroke

 



Primer  Anterior  2 a 3 de 3  Siguiente   Último  
Respuesta  Mensaje 2 de 3 en el tema 
De: karmyna Enviado: 05/01/2014 02:49

                                  

 

 

 

                                                                           

 
 
 

Tchin252525252DTchin2525252520Flute.gif picture by RaiodeLuar

 

 

Karmyna

                                                                                                       

 


Respuesta  Mensaje 3 de 3 en el tema 
De: karmyna Enviado: 05/01/2014 03:00
 
 
Postales de Año Nuevo 2014 con Bonitas Frases Postales de Año Nuevo 2014 con Bonitas Frases



 
©2025 - Gabitos - Todos los derechos reservados