Empiezan los
preparativos, cual será el menú de la cena y en que lugar nos reuniremos.
Y aparece la
pregunta inevitable:
‘'¿Cuantos somos este año? ...
Y en la
respuesta aparecen implícitamente: "Las Sillas Vacías" de las personas que no están …
Las que están lejos y que la vida llevo por otro camino, la que eligió no
estar porque
se enemisto con alguien
de la familia y la que Dios se llevo a su lado ... Y
aparece la tristeza y las sillas vacías duelen …
Entonces es cuando más
necesito ese abrazo que cobija, que protege, que es prolongado … y que
lamentablemente no va a llegar …
Entonces me doy cuenta que extraño esa
sonrisa, esas platicas amenas, esa complicidad que teníamos,
esa mano
dispuesta a ayudarme siempre, esa compañía … Los ojos se me llenan de lágrimas y
duele mucho,
muchísimo, pero esa es la realidad y hay que aceptarla,suspiro
profundo y cierro mis ojos como queriendo que ese aire
llegue hasta esa
persona que me falta, abro mis ojos y giro la cabeza y lo que veo son las
"Sillas Ocupadas":
son las personas que me aman y que yo amo ... ¡Y entonces
sonrió!
Así es la vida con pérdidas y ganancias … Y así voy a brindar el 24 y
el 31
con lágrimas contenidas por esas "Sillas Vacías" y sonriendo desde el
alma por las "Sillas Ocupadas".
Alegre, si alegre, a pesar de la tristeza,
porque estar alegre no necesariamente es estar feliz .
La alegría es una
emoción pasajera que termina cuando el buen momento finaliza.
La felicidad
es otra cosa, es un estado del alma. Ser feliz, es estar en paz, pleno, en paz
sabiendo que estoy recorriendo el camino correcto, el que coincide con el
sentido de mi vida,
el de mis temores y mi coraje, mis virtudes y mis
defectos, mi camino, el que yo elegí,
un camino en el que hice todo lo que
pude y más …
Brindaré por los que no están y brindaré incondicionalmente por
los que si están,
por los que ame y por los que amo y con lo que tengo
procuraré ser feliz.
Posiblemente tu también tengas "Sillas Vacías" en tu
mesa este año al igual que yo,
pero a pesar de los ausentes y con la dicha
de los presentes, te deseo una Feliz Navidad
y Próspero Año Nuevo para ti y
toda tu familia, que sus anhelos se hagan realidad
y que llegue a ti lo que
tanto anhela tu corazón. Disfruta de lo que tienes hoy porque no todos tienen
esa dicha.
Un gran abrazo, bendiciones para tu
vida.