Cuando yo escribo poemas, tú me conjugas los versos,
con las mejores palabras que se refieran a ti;
si ya el corazón te di y quiero que tú lo ames,
antes que alguna pena por otro amor me lo mate.
Y si te habla de mí diciéndote que estoy muy lejos,
dile que eso es incierto que llego muy pronto a ti;
que pájaro yo no soy y no puedo ir con mi vuelo,
pero el amor tiene alas, por eso lo pienso así.
Tiene el poder del aire y jugar como la brisa,
para sacarte sonrisas cuando te acuerdas de mi;
por eso con frenesí ya mi alma se apodera,
de saber que soy tu hombre y que me harás ser feliz.
Que ya se dejen de cuentos las gentes que nos envidia,
sea por celos o por perfidia ya no podrán destruir,
lo que guarda el corazón en mi pecho tan profundo,
que ni acabándose el mundo me han de alejar de ti.
El amor tiene alas mi vida, mi cielo, mi reina hermosa,
y tú has venido a ser, la prenda que yo atesoro,
vales mucho más que el oro y riqueza ya existente,
y aunque murmure la gente, espérame que llego allí.