Cuando José Arcadio Buendía se dio cuenta de que la peste había invadido el pueblo, reunió a los jefes de familia para explicarles lo que sabía de la enfermedad del insomnio, y se acordaron medidas para impedir que el flagelo se propagara a otras poblaciones de la ciénaga. Fue así como les quitaron a los chivos las campanitas que los árabes cambiaban por guacamayas, y se pusieron a la entrada del pueblo a disposición de quienes desatendían los consejos y súplicas de los centinelas e insistían en visitar la población. Todos los forasteros que por aquel tiempo recorrían las calles de Macondo tenían que hacer sonar su campanita para que los enfermos supieran que estaban sanos. No se les permitía comer ni beber nada durante su estancia, pues no había duda de que la enfermedad sólo se transmitía por la boca, y todas las cosas de comer y de beber estaban contaminadas por el insomnio. En esa forma se mantuvo la peste circunscrita al perímetro de la población. Tan eficaz fue la cuarentena, que llegó el día en que la situación de emergencia se tuvo por cosa natural, y se organizó la vida de tal modo que el trabajo recobró su ritmo y nadie volvió a preocuparse por la inútil costumbre de dormir.
La peste del insomnio-Extraído de Cien años de soledad -
Gabriel García Márquez.
Magistrales novelas muy actuales escritas por "Gabo" en tiempos no sospechosos ... ahí van algunas críticas de gente común que ha leído a Gabriel García Márquez :
"Era como si dios hubiera querido poner a prueba, toda la capacidad de asombro a los habitantes de "macondo", manteniéndolos en un constante vaivén entre el alborozo y el desencanto, entre la duda y la revelación, hasta el extremo de que ya nadie sabía a ciencia cierta, donde estaban los límites de la realidad "
Que maravilla. Una extraña epidemia, narrada con la maestría de Garcia Márquez. Hay otra en Cien Años de Soledad, en que se iban olvidando el nombre de las cosas. Entonces escribian en cada cosa el nombre, por ejemplo mesa. Una imaginación prodigiosa. La imagen es tan nuestra como el color del río. Color de
León. Buena manera de jerarquizarlo.
Tendré que releer el libro. No recordaba ese episodio. En "El amor en los tiempos del cólera" recrea otra epidemia.