Si bien el origen de los BARRILETES es desconocido, se sabe que alrededor de 1200 AC fueron remontados en China y el Archipiélago de la Malasia.
En España se llaman “cometas” palabra de origen griego que significa “cabellera”, en referencia a las largas colas que arrastran los modelos clásicos.
Su potencial científico fue utilizado por Benjamin Franklin, durante el siglo XVIII y le permitió inventar el pararrayos a partir de un juego con su cometa eléctrica.
Posteriormente, en 1903 el pionero de la aviación Samuel Franklin Cody, voló su cometa de seda negra junto con una canasta para transportar o albergar personas. Este sistema fue adoptado por la armada y ejército británicos.
Así mismo este invento fue utilizado para realizar observaciones meteorológicas, fotografías aéreas, con fines militares y de comunicación.
Su uso más común y simple es el de entretenimiento, siendo utilizado hoy en torneos de cometas, en donde el objetivo principal es llegar más alto y en otros derribar al cometa del contrincante.
Los armaba con medias cañas, bien secas y derechas, papel de seda o papel barrilete, hilo resistente y engrudo ; también algunos trapos livianos para hacer su cola.