Mami, porqué estás llorando?" le preguntó a su mamá.-
"Porque soy una mujer" ella le contestó.-
"Yo no entiendo", le dijo.-
Su madre solo lo abrazó y le dijo, "y nunca lo sabrás"...
Mas tarde el pequeño le preguntó a su padre, "Porqué parece que mamá llora sin razón?"
"Todas las mujeres lloran sin razón" fué todo lo que su padre le pudo contestar....
El pequeño creció y se hizo hombre, pero siempre preguntándose "porqué lloran las mujeres?"
Finalmente le hizo una llamada telefónica a Dios;
cuando Dios contestó la llamada, el hombre le preguntó:
"Dios, porqué las mujeres lloran tan fácilmente?
Dios dijo...
Cuando creé a la mujer, ella tenía que ser especial...
Le hice sus hombros suficientemente fuertes como para cargar el peso del mundo; pero al mismo tiempo suficientemente suaves para dar consuelo...
Le dí una fuerza interior para soportar el nacimiento del hijo y los rechazos que tantas veces llegan del propio hijo.... Le dí una dureza que le permitiera seguir cuando
odos los demás se rindieran y pudiera hacerse cargo de su familia a través de las enfermedades y fatigas sin quejarse...
Le dí también la sensibilidad para amar a sus hijos bajo cualquier circunstancia aún cuando su hijo la hubiese herido terriblemente.-
Esta misma sensibilidad la ayudará a calmar los dolores de su hijo y al mismo tiempo compartir con él las ansiedades y lágrimas de su juventud...
Le di fuerzas, también, para llevar a su marido a través de sus faltas y la formé a ella de la costilla de él para proteger su corazón.
Le dí sabiduría para que supiera que un buen marido nunca hiere a su mujer, muchas veces prueba sus fuerzas y su resolución para estar a su lado constantemente.-
Le di a ella una lágrima para guardar, exclusivamente de ella para usar en cualquier momento que la necesitara.-
Es su única debilidad...
Es una lágrima para la humanidad...
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