Nada sucede por casualidad o por la suerte.
Enfermedades, heridas, el amor,
momentos perdidos de grandeza o de pura tonterías,
todo ocurre para probar los limites de tu alma.
Sin estas pequeñas pruebas la vida seria como
una carretera recién empaventada, suave y lisa.
Una carretera directa sin rumbo a ningún lugar,
plana cómoda y segura, mas empañada y sin razón.
La gente que conoces afectan tu vida,
las caídas y los triunfos que tu experimentas
crean la persona que eres.
Aun se puede aprender de la malas experiencias.
Es más, quizás será las mas significativas en nuestras vidas.
Si alguien te hiere, te traiciona o rompe tu corazón
le das gracias porque te ha enseñado
la importancia de perdonar, de la confianza
y a tener mas cuidado de a quien le abres tu corazón.
Si alguien te ama ámalo tu a ellos no porque ellos te aman
sino porque te han enseñado a amar y a abrir tu corazón
y tus ojos a las cosas pequeñas de la vida.
Has que cada día cuente y aprecia cada momento además
de aprender de todo lo que puedas aprender, porque quizás
mas adelante no tengas la oportunidad
de aprender lo que tienes que aprender de este momento.
Entabla una conversación con gente que no hayas dialogado
nunca y actualmente escúchalos y presta atención.
Permítete enamorarte, liberarte y poner tu vista en un lugar bien alto.
Mantén tu cabeza en alto porque tienes todo el derecho a hacerlo.
Repítete a ti mismo que eres un individuo magnifico y créelo,
sino crees en ti mismo nadie mas lo hará tampoco.
Crea tu propia vida encuéntrala y luego vívela....
(autor desconocido)