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Las personas necesitamos de los demás, necesitamos reconocimiento, cariño, amor, afecto; necesitamos una sonrisa, un gesto cariñoso, un abrazo (aunque todo esto sea virtual) para poder seguir adelante; más sin embargo, a veces tendemos a ponernos muchas limitaciones, prejuicios, trabas psicológicas, culturales, etc. etc., que al final lo único que nos producen es un comportamiento afectivo inmaduro, nos sentimos incompletos y sufrimos nuestra soledad. Diariamente debemos actuar en función de alcanzar nuestra madurez afectiva, algo que necesitamos integrar a nuestra personalidad y de esa manera poder armonizar nuestra relación con nosotros mismos y con l@s demás, en nuestra profesión, nuestro trabajo, nuestras relaciones sociales, nuestra sexualidad, porque la madurez afectiva debe ser considerada como requisito indispensable para el óptimo funcionamiento de nuestra personalidad. El afecto es una necesidad natural, ya que las personas no fuimos creadas para ser o estar sol@s, no crecemos ni nos formamos solos como personas, nuestras relación con otras personas es esencialmente necesaria como el bebé necesita de su madre, el bebé ama a su madre porque la necesita; es un apetito natural que tenemos los seres humanos, apetito que se fundamenta en el amor. El amor es el motor de nuestra vida afectiva, el amor existe y generalmente tiene un color afectivo según lo plantea el profesor belga J. Gevaert, ese color afectivo es distinto según sea la relación: conyugal, de padres, hijos, amistad, siendo esta última la relación que nos vincula al tema planteado. Las relaciones entre personas pueden producir conflictos, discrepancias y muchas otras cosas desagradables, pero no por eso dejamos de ser personas que nos debemos a los demás. Las personas necesitamos sentir que los demás nos aman, tambien necesitamos manifestar nuestro amor a los demás y esto lo hacemos de diferentes maneras, puede ser a través del lenguaje táctil, lenguaje corporal: abrazo, cariacia, ternura, etc., diferentes formas de expresión que tienen muchas veces una importancia decisiva en las diferentes etapas de nuestra vida. Cuando se ama a alguien, se siente naturalmente la necesidad de tocarle, de sentir que está allí, junto a nosotros. La madre toma al niño, lo aprieta contra su corazón, lo mece..... el hombre estrecha la mano del amigo, le da una palmada cariñosa en la espalda; la mujer camina del brazo de su amado, lo abraza, besa, acaricia..... en fin no alcanzaríamos a numerar las diferentes formas de expresar el afecto. El desarrollo y equilibro de las personas depende en gran medida del amor que se recibe de los demás y en ese sentido la amistad juega un papel elemental y de complemento al ser una manifestación de amor que se ubica fuera del ambiente familiar y que además se aparta del color sexual. Santo Tomas considera que "el amor de amistad es un amor perfecto", un éxtasis de la intimidad, es econtrarse con uno mismo en los demás. El amor de amistad es íntimo, entonces la amistad es una relación de intimidad que se produce cuando la personas llegan a descubrir su propia intimidad y aprenden a compartirla con los demás; también implica el desarrollo de virtudes, como algo imprescindible, pienso que la lealtad es básica para ayudarnos a aceptar los vínculos que implica la adhesión al amigo o amiga; la generosidad puede facilitarnos actuar a favor de otra persona teniendo presente que ella es útil y necesaria para nuestro desarrollo como persona; la comprensión nos ayudará a reconocer los distintos factores que influyen en la situación de otra persona y su estado de ánimo; el respeto y la confianza nos llevan a mostrar interés por nuestra amiga o amigo, creer en ella o él y en su posibilidad de mejorar continuamente. Las buenas amistades luchan por superarse en sus virtudes y demandan de sus amigos o amigas mucha comprensión; pero la vida agitada de hoy día hace que dediquemos poco tiempo a nuestras amistades, algo que no es lógico y mucho menos humano. La amistad es amor récíproco realizado a través de la unión de dos voluntades, donde cada un@ considera al otr@ como a si mism@, desea el bien de la otra persona como si fuese su propio bien y busca la presencia de la otra persona porque es una alegría de ambos. El amor de amistad supone una cierta comunión de vida, unidad de pensamiento, sentimiento y voluntad (aunque eso no limite que podamos tener amistades con criterios diferentes a los propios). San Agustín al habla de la muerte del amigo íntimo dice: "porque yo sentí que mi alma y la suya no eran más que una en dos cuerpos, y por eso me causaba horror la vida, porque no quería vivir a medias, y al mismo tiempo temía mucho morir, porque no muriese del todo aquél a quien había amado tanto." Pienso que todos debemos (o deberíamos tener) experiencia de amistad, porque eso supera cualquier concepto por mucho que tratemos de explicarlo en este foro y de esta manera cada quien puede responder con su propia historia, cada una las personas tenemos nuestra particular experiencia, nuestra particular forma de necesitanos, pero estoy casi seguro que en el fondo tu y yo tenemos muchos puntos donde poder coincidir. Necesito tu amistad porque es una búsqueda natural impulsada por el amor; ya antes hemos coincidido en que la busqueda de la felicidad no tiene razón de ser, pero pienso que si algo debemos buscar es la verdad, nuestra verdad, debemos buscarnos nosotros mismos, iniciando por nuestro interior, pero al hacerlo, automaticamente somos expulsados a salir de nosotros, somos expulsados para ponernos en contacto con otras personas, para lograr la comunión interpersonal, como personas interdependientes de los demás, necesitamos manifestar nuestro lenguaje de amor, tomar consciencia de lo nuestro, de nuestra dignidad, necesitamos comprendernos como un todo, construirnos de manera recíproca, como seres humanos tu y yo nos necesitamos más de lo que creemos. Nuestra acciones pueden estar pendiendo naturalidad, nuestro trato puede no estar completo, probablemente estamos colocando barreras que nos impiden encontrarnos, barreras que tambien dificultan que cada uno de nosotros se encuentre a si mism@, podemos tener necesidad de recuperar ese contacto recíproco. Necesitamos nuestra amistad, necesitamos manifestarnos con expresiones del lenguaje de amor, necesitamos manifestar ese "amor perfecto" que dice Santo Tomás, necesitamos desarrollar el hábito que tiene por objeto las acciones para con los demás bajo el signo de la gratitud; necesitamos amarnos intimamente como amigos o amigas simplemente por el hecho de que somos personas. La comunicación es el principal recurso que tenemos para desarrollar nuestra amistad, debemos harcerlo recíprocamente, nuestra actitud de dar amor debe estar siempre presente, liberándonos del prejuzgar el amor que recibimos de los demás, hay que dar amor porque de esa manera estamos utilizando nuestro potencial para encontrarnos a nosotros mismos, para encontrar a los demás y contruir nuestros vínculos de amistad. De esta manera estaremos obrando en función de nuestra madurez afectiva y podemos convertirnos en personas equilibradas en nuestras relaciones. Tener amistades con quienes compartir nuestra vida es un regalo que por naturaleza recibimos, debemos preciarlo, cultivarlo y cuidarlo; por eso necesito tu amistad, por eso te considero mi amiga o amigo y por eso es para mi menos relevante que me tratas de demostrar que no lo eres.