Los Días Grises
Los hay, desde luego. ¡Y muy frecuentes!
Hay días en los que brilla el sol, la vida sigue como siempre: las cosas no han cambiado, nada urgente nos falta en apariencia y sin embargo... Nos sentimos mal, como incompletos, como... insuficientes, como desalentados y extraños.
Ese día en que abres los ojos y no sabes por qué, traes un desánimo que te nació en el sueño, que te brotó en lo alto de la noche y se filtró a tu alma gracias a quién sabe que asociaciones oscuras y angustiosas.
Ese día en que te cuesta trabajo levantarte. ¡Ayer estaba todo bien! Ese día en que presientes que nada va a ir como tú lo deseaste, ese día que no tiene color, cuyas primeras horas son de laxitud, recelo o ligera zozobra.
Ese día, es un día que nació gris.
Nunca se puede evitar esto. La química de nuestro cuerpo, la inercia de nuestra psique, la reacción desconocida de factores internos a estímulos que no descubrimos todavía, nos quieren pintar este día de gris. Gris opaco. Gris depresivo. Gris pasivo. Gris marginal.
Pero...
Lo que sí puedes hacer, cuanto antes, es tomar tú mismo, tú misma, la decisión de activar tus propios pinceles y aprovechar ese gris neutro para inundarlo de figuras diversas: ¡Flechas verdes, curvas doradas, zigzags blancos, puntos azules!
Fue un día frió y lluvioso cuando decidiste confesarme tu gran secreto,
Todavía temblabas antes de decírmelo, pensando mil y un regaños,
Pero olvidabas que yo te quiero más que una confesión, más que un
Secreto abierto, ya sabía que ocultabas algo y eso me lastimaba, pues
Aun no confiabas en mí lo suficiente, pero me dijiste y yo escuche
Pacientemente tus razones para ocultar tal verdad, después te cubrí con
Mi amor y te arrulle con mi comprensión y en ese instante comprendiste
Cuanto te quiero, cuanto representas para mí, cuanto yo te comprendo,
Siempre te voy a querer aunque la vida nos separe, pero recuerda que ni
La muerte misma arrancara de mi espíritu tu cariño, pues estas prendida a él
Como el día y la noche son uno solo en el tiempo, como el mar y la arena,
Como la lluvia y el arco iris, te quiero mucho, nunca lo olvides, aun hoy
Que siento que te separan de mí, no lo voy a permitir, recuerda que siempre
Estarás en mi añejo corazón, y si un día vez que me alejo no es por falta de
Amor, es por protegerte de mí mismo, te quiere
Un ángel caído y redimido por ti.
Con Cariño Y Mucho Amor!!
Carlitos