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¡Oh hermosa por los cielos espaciosos, por las ondas de color ámbar del grano, por las majestuosas montañas de color púrpura sobre la llanura fructífera! ¡América! Dios derramó su gracia sobre ti y coronó tu bien con la hermandad ¡De mar a mar resplandeciente! ¡Oh hermosa para los pies de los peregrinos, Cuya severa y apasionada tensión Una vía para la libertad batió a través del desierto! ¡América! ¡América, Dios repara todos tus defectos, confirma tu alma en el dominio de ti mismo, tu libertad en la ley! ¡Oh hermosa para los héroes demostrados en la lucha liberadora, que más que a sí mismo amaba su país, y la misericordia más que la vida! ¡América! ¡Que Dios tu oro refine, hasta que todo éxito sea nobleza, y toda ganancia divina! ¡Oh hermosa para el sueño patriota que ve más allá de los años, brillan tus ciudades de alabastro, sin que las lágrimas humanas las apaguen! ¡América! Dios derramó Su gracia sobre ti y coronó tu bien con la hermandad ¡De mar a mar resplandeciente!
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