Hola pequeña.
Hola pequeña, ¿cómo estás?
¿Aún te acuerdas de mi?
Soy aquel loco atrevido
que soñaba con una tarde en París.
Hola pequeña, ¿cómo estás?
Hace mucho tiempo que no hablamos.
Hace mucho tiempo que no te digo
alguna estupidez, algo raro.
Hola pequeña, ¿cómo estás?
Ya han pasado tres largas primaveras.
Y aunque yo ya he caído en el olvido,
tú sigues presente en las estrellas.
Hola pequeña, ¿cómo estás?
Yo como siempre, fiel a mis versos.
Quise ser más que tu amigo,
pero nunca te pude decir: “te quiero”.