Alabanza llena de Esperanza
Bendíce alma mía, a Jehová, y no olvides ninguno de sus beneficios. Salmo 103.2
Lectura Salmo 103.1-14
Uno de mis amigos estaba llorando un bello día de verano, incapaz de lidiar con las dificultades de la vida. Otra amiga no podía ver más allá de las tristezas de su pasado, las cuales habían alterado su vida. Y otro tenía que luchar con la clausura de la pequeña iglesia que había pastoreado fielmente. Un cuarto amigo había perdido su empleo en un ministerio local.
¿Qué pueden hacer nuestros amigos que luchan -o cualquiera de nosotros- para encontrar esperanza? ¿a dónde nos volvemos cuando el mañana no ofrece promesa de felicidad alguna?
Podemos alabar o "bendecir al Señor, tal y como lo dijo David en el Salmo 103.
En medio de los problemas, reconocer el papel de Dios en nuestras vidas puede ayudar a dejar de pensar en heridas de nuestros corazones y, en vez de ello, forzarnos a morar en la grandeza de nuestro Dios. David conocía las tribulaciones. Enfrentó la amenza de enemigos, las consecuencia de su propio pecado y los desafios del dolor. Y, sin embargo, también reconoció el poder sanador de la alabanza.
Por esa razón en el Salmo 103 podemos mencionar las razones por las que debemos volver nuestra atención a Dios, quien nos colma de beneficios Nos perdona, nos sana, nos redime, nos corona con amor y compasión, satisface nuestros deseos y nos renueva. David nos recuerda que Dios provee justicia y rectitud, y está lleno de gracia y amor.
Toma a David como ejemplo: Alabar la grandeza de Dios pone esperanza en nuestros corazones atribulados.
J. David Branon
Padre en el nombre deTu Hijo Jesucristo, Que tu Santo Espíritu nos enseñe a ser alabadores en espíritu y verdad, que aprendamos a alabarte y adorarte porque Tú vives y reinas, porque Tú eres Todopoderoso, Soberano e Inmutable, y todo cuanto nos acontece siempre es para nuestro bien.El alabarte nos llena de paz, amor y gozo es donde salimos fortalecidos, la alabanza nos lleva a Tu trono de gracia y ahi encontraremos reposo para nuestra angustiada alma, porque sólo en tu presencia hay plenitud de gozo y Tu habitas en medio de la alabanza. En el nombre de Jesús, Amén
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