Dios te bendiga, querida Migdalia! Me gozo en verte aqui! Te extrañaba un montòn, pero no queria importunarte. Pero Dios siempre ve nuestros anhelos de corazón y vió el mío.
Te deseo una estadia bendecida pues sé que donde tú estés bendices grandemente. Te quiero mucho. Un besoooooooooo!.