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General: EL EVANGELIO DE HOY LUNES 31 DE ENERO DE 2011... DIOS LOS BENDIGA.FELIZ DIA..
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De: hermes sarmiento  (Mensaje original) Enviado: 31/01/2011 12:10

El Evangelio de Hoy lunes 31 de Enero 2011

Lunes de la IV Semana del Tiempo Ordinario

¡Bienvenidos Hermanos y hermanas en Cristo Jesús!

"Habla, Señor, que tu siervo escucha".

"Señor, creo que en las Sagradas Escrituras

que voy a leer se contiene Tu Santa Palabra.

Haz que la escuche con todo respeto y amor.

Ilumina mi mente para que por medio de ella yo conozca Tu santa voluntad,

y mueve mi corazón para que yo cumpla con fidelidad lo que Tú quieres de mí.

Espíritu Santo, ilumina con Tu luz mi cabeza y enciende mi corazón 

para que la Palabra de Dios pueda entrar y quedarse siempre en mí.

Para conocer por medio de Tu Palabra, tu Divina Voluntad,

 lo que puedo y debo hacer, lo que debo y puedo modificar, y que no depende de mi cambiar,

Como debo conducirme en los acontecimientos de la vida.

Señor, aquí tienes mi corazón abierto, dispuesto a escuchar Tu Palabra con

Corazón sencillo y con la voluntad decidida para obedecerle.

En Ti esta la luz y la salvacion.Amen y Amen

Primera Lectura

Hebreos 11, 32-40

Hermanos: ¿Para qué seguir hablando sobre el poder de la fe? Me faltaría tiempo, si tuviera que exponer en detalle lo que hicieron Gedeón, Baruc, Sansón, Jefté, David, Samuel y los profetas. Por su fe, ellos conquistaron reinos e hicieron justicia, lograron que se fueran cumpliendo las promesas divinas, cerraron las fauces de los leones, dominaron la violencia del fuego, se salvaron del filo de la espada, vencieron las enfermedades, fueron valientes en la guerra y pusieron en fuga a los ejércitos extranjeros.
Hubo también algunas mujeres, que por su fe obtuvieron la resurrección de sus hijos muertos. Muchos, sometidos a las torturas, prefirieron no ser rescatados, para alcanzar así la resurrección. Unos sufrieron escarnios y azotes, cadenas y cárcel. Otros, fueron apedreados, aserrados, torturados y muertos a espada; anduvieron errantes, cubiertos con pieles de ovejas y de cabras, faltos de todo, pasando necesidad, apuros y malos tratos. Esos hombres, de los cuales no era digno el mundo, tuvieron que vagar por desiertos y montañas, por grutas y cavernas.
Sin embargo, todos ellos, aunque acreditados por su fe, no alcanzaron a ver el pleno cumplimiento de la promesa: es que Dios había dispuesto para nosotros algo mejor y no quería que ellos llegaran, sin nosotros, a la perfección.

Meditación

Cuando hablamos de la fe estamos hablando no de un concepto, sino de una actitud ante la vida. Solamente cuando el hombre es sometido a la prueba, es cuando en realidad puede entender lo que significa tener o no fe.
Tener fe, creerle a Dios, es ir en contra de todas las evidencias y es por ello que sólo cuando todas las evidencias son contrarias a lo que Dios nos ha ofrecido, es cuando se entiende con exactitud lo que significa tener fe.
Así, por ejemplo, cuando uno ve sufrir a un hermano o a un hijo, cuando muere o enferma gravemente un niño, cuando entramos en contacto estrecho con el dolor y el sufrimiento, es cuando se pone a prueba nuestra fe, pues no es fácil creer que detrás de todas estas "desgracias" está un proyecto de amor y que el Dios revelado por Cristo, es verdaderamente un Padre amoroso al cual no le gusta ver sufrir a sus hijos. Esto es la fe.
Finalmente, es tener la seguridad de que Dios, que es amor, está obrando con amor y misericordia en medio de nuestras crisis. Sólo desde ésta perspectiva podemos entender la fe de Abraham y de María. En medio de un mundo rodeado de dolor, de guerras, de violencia y enfermedad, hoy más que nunca debemos fortalecer la fe en el Dios del amor, de la paz y de la fraternidad.

Salmo 31,20.21.23.24.

¡Qué grande es tu bondad, Señor! Tú la reservas para tus fieles; y la brindas a los que se refugian en ti, en la presencia de todos.
Tú los ocultas al amparo de tu rostro de las intrigas de los hombres; y los escondes en tu Tienda de campaña, lejos de las lenguas pendencieras.
En mi turbación llegué a decir: "He sido arrojado de tu presencia". Pero tú escuchaste la voz de mi súplica, cuando yo te invocaba.
Amen al Señor, todos sus fieles, porque él protege a los que son leales y castiga con severidad a los soberbios.

El Evangelio de hoy

Marcos 5, 1-20

En aquel tiempo, después de atravesar el lago de Genesaret, Jesús y sus discípulos llegaron a la otra orilla, a la región de los gerasenos. Apenas desembarcó Jesús, vino corriendo desde el cementerio un hombre poseído por un espíritu inmundo, que vivía en los sepulcros. Ya ni con cadenas podían sujetarlo; a veces habían intentado sujetarlo con argollas y cadenas, pero él rompía las cadenas y destrozaba las argollas; nadie tenía fuerzas para dominarlo. Se pasaba días y noches en los sepulcros o en el monte, gritando y golpeándose con piedras.
Cuando aquel hombre vio de lejos a Jesús, se echó a correr, vino a postrarse ante él y gritó a voz en cuello: "¿Qué quieres tú conmigo, Jesús, Hijo de Dios altísimo? Te ruego por Dios que no me atormentes".
Dijo esto porque Jesús le había mandado al espíritu inmundo que saliera de aquel hombre. Entonces le preguntó Jesús: "¿Cómo te llamas?" Le respondió: "Me llamo Legión, porque somos muchos". Y le rogaba con insistencia que no los expulsara de aquella comarca.
Había allí una gran piara de cerdos, que andaban comiendo en la falda del monte. Los espíritus le rogaban a Jesús: "Déjanos salir de aquí para meternos en esos cerdos". Y él se lo permitió. Los espíritus inmundos salieron del hombre y se metieron en los cerdos; y todos los cerdos, unos dos mil, se precipitaron por el acantilado hacia el lago y se ahogaron.
Los que cuidaban los cerdos salieron huyendo y contaron lo sucedido, en el pueblo y en el campo. La gente fue a ver lo que había pasado. Se acercaron a Jesús y vieron al antes endemoniado, ahora en su sano juicio, sentado y vestido. Entonces tuvieron miedo. Y los que habían visto todo, les contaron lo que le había ocurrido al endemoniado y lo de los cerdos. Ellos comenzaron a rogarle a Jesús que se marchara de su comarca.
Mientras Jesús se embarcaba, el endemoniado le suplicaba que lo admitiera en su compañía, pero él no se lo permitió y le dijo: "Vete a tu casa a vivir con tu familia y cuéntales lo misericordioso que ha sido el Señor contigo". Y aquel hombre se alejó de ahí y se puso a proclamar por la región de Decápolis lo que Jesús había hecho por él. Y todos los que lo oían se admiraban.

Reflexión

«El endemoniado le pidio que lo admitiese en su compañía... Pero le dijo: 'Vete a casa con los tuyos y anúnciales lo que el Señor ha hecho contigo'

Estamos llamados a amar al mundo. Y tanto amó Dios al mundo que le dio a Jesús (Jn 3,16). Hoy, ama tanto al mundo que nos da al mundo, a ti y a mí, para que seamos su amor, su compasión, su presencia a través de una vida de oración, de sacrificio, de abandono. La respuesta que Dios espera de ti es que llegues a ser contemplativo, que seas contemplativo.
     Cojámosle la palabra a Jesús y seamos contemplativos en el corazón del mundo, porque, si tenemos fe, estamos perpetuamente en su presencia. El alma, través de la contemplación, saca directamente del corazón de Dios las gracias que la vida activa tiene el encargo de distribuir. Nuestras existencias deben estar unidas a Cristo que nos habita. Si no vivimos en la presencia de Dios, no podemos perseverar.
     ¿Qué es la contemplación? Vivir la vida de Jesús. Es así como yo la comprendo. Amar a Jesús, vivir su vida en el seno de la nuestra, vivir la nuestra en el seno de la suya... La contemplación no es encerrarse en una cabina oscura, sino dejar que sea Jesús quien viva su Pasión, su amor, su humildad en nosotros, que ore con nosotros, que esté con nosotros, y santifique a través nuestro. Nuestra vida y nuestra contemplación son una misma cosa. No se trata aquí de hacer sino de ser. De hecho se trata del gozo pleno de nuestro espíritu por el Espíritu Santo que insufla en nosotros la plenitud de Dios y nos envía a toda la creación como su personal mensaje de amor (Mc 16,15).

Esta historia del Evangelio nos parecería estar lejana a nuestra realidad, sin embargo, la verdad es que se repite frecuentemente hoy en nuestra sociedad dominada por el materialismo. Jesús sana y libera a un hombre, a un ser humano que sufría a causa de unos demonios. Al hacerlo, los demonios destruyen toda una piara de cerdos. Los habitantes, en lugar de agradecer el haber liberado y sanado al pobre hombre que sufría, se preocupan más por la pérdida material de una piara de cerdos. ¿Vale más la piara de cerdos que la salud y bienestar de un ser humano? Como consecuencia, la comunidad rechaza a Jesús.
Como vemos, la historia se repite una y otra vez. Hoy es más importante la cantidad de producción y la eficiencia, que la vida familiar, social y económica de los trabajadores; son más importantes nuestras pertenencias, que el bien social de la comunidad; es más importante el trabajo y el bienestar económico, que la vida familiar y la atención a los hijos. Preferimos lo material a lo espiritual. Y cuando Jesús, a través de la Escritura o de la Iglesia, nos advierte de esto, o busca ayudarnos a liberarnos de estas esclavitudes, la respuesta es: ¿Qué tiene la Iglesia (o el mismo Jesús) que decirme sobre qué es más importante? ¿Qué tiene que hacer en mis negocios, en mi medio social, en mi vida?
No dejemos que nos domine lo material. Dios nos ha regalado todas las cosas materiales, las cuales son buenas y son para nuestro bienestar, pero jamás deberán estar por encima de los valores, como son: la vida humana, la vida familiar, y la protección del medio ambiente. Nada vale una piara de cerdos comparada con la alegría que produce el ver a un hermano sano y feliz.

Permite que el amor de Dios llene hoy tu  vida. Ábrele tu corazón.Como María, todo por Jesús y para Jesús.

ME COMPROMETO HOY

El día de hoy, aunque todo parezca ir en contra mía, tendré la confianza de que Dios nunca me abandona, y así se lo haré saber a quienes al toparse conmigo, muestren dudas o temores, porque sé que Dios siempre está a mi lado.

Señor Dios, que por medio de tu Espíritu Santo, despiertas en nosotros el don de la fe, ayúdanos a ser fieles a ti y dóciles a tu palabra para vivamos iluminados por esa presencia tuya que nos da la certeza de que siempre estás a nuestro lado, comunicándonos la vida y despertando en nosotros la esperanza que se funda en que siempre cumples tus promesas, que jamás desoyes nuestras oraciones y de que nunca abandonas a los que confían en ti. Por Jesucristo nuestro Señor. Amén.

GRACIAS SEÑOR POR ESCUCHARNOS

* Te agradecería compartieras con tus amigos esta reflexión.
Con el mayor de mis respetos. Saludos y Dios los Bendiga. *

Por tanto. ID enseñad a todos las naciones,

Bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.

Y les dijo: id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura < marcos 16:15>

“Los cristianos estamos obligados a utilizar
los mejores medios de comunicación a nuestro alcance

en cada época para difundir el Evangelio de Cristo” ...

SEÑOR Bendice NUESTRA CASITA

Y Todo Aquel Que Esta leyendo Este Mensaje  y su familia.

¡¡¡NO OLVIDES SONREIR ESTE NUEVO AÑO!!!

GRACIAS POR TU AMISTAD

FELIZ DIA.

GRACIAS A LA HNA SILVIA POR EL FONDO

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