ALGO CAMBIO
Algo cambio en ti, desde hace un tiempo no eres el mismo, tratas de disimularlo, pero muy en lo profundo de tu ser, sabes que algo cambio.
Vas a la Iglesia y regresas, haces esto o aquello, pareciera que estas programado para realizar una rutina diaria, pero más allá de todo eso, no hay un sentimiento real sobre lo que haces. Simplemente lo haces, porque estas acostumbrado a hacerlo y no porque eres consciente de lo que eso significa.
En muchas ocasiones has animado a otros, siempre tuviste palabras de aliento para los demás, te preocupabas del estado anímico de las personas, pero ahora sientes que no hay alguien que te anime a ti, a pesar que no lo demuestras, necesitas urgentemente una palabra que de aliento y renueve tu vida.
Tú no eres de los que se acomodan a un ritmo de vida monótono y frio. Tú no eres tampoco de los que retroceden fácilmente, sino de los que tratan siempre de salir adelante, de los que luchan contra cualquier situación con el único objetivo de tratar de agradar a Dios. Pero sin duda, algo cambio en ti.
Creo que sé que fue lo que cambio: Ahora ya no pasas mucho tiempo con el Señor.
Poco a poco la rutina del día fue consumiendo tu tiempo a tal punto que ahora, tienes menos tiempos para estar en intimidad con el Señor, desde hace un tiempo ya no disfrutas de esos tiempos de refrigerio, poco a poco fuiste alejándote de esa comunión y ahora las cosas no tienen el mismo sabor que antes tenían.
¿Cuándo fue la última vez que le dedicaste tiempo a Dios?, ¿Cuál fue tu última experiencia delante de su presencia?, ¿Hace cuanto no disfrutas de un momento de refrigerio espiritual?
Es imposible que un pozo seco pueda dar agua, así como es imposible sobrevivir en un desierto sin agua que beber.
Estoy seguro que tienes experiencias con Dios sobrenaturales; como esa vez que pensaste que no podías mas y Dios te sorprendió con una fresca presencia suya sobre tu vida, cubriendo tu cuerpo, provocando que sintieras una paz sobrenatural. Como la otra vez que todo está perdido y Dios te sorprendió fortaleciéndote y enseñándote que para Él no hay nada imposible.
Lo que has avanzado, lo que has logrado ha sido a base de tu relación personal e intima como Él. Por lo tanto no puedes seguir avanzando si no es por medio de una verdadera relación personal con Él.
¿Cuánto tiempo le dedicas a los diferentes quehaceres del día?, ¿Cuánto a tu pasatiempo?, ¿Cuánto a aquello que no tiene ningún provecho espiritual?, ¿Será posible que en tu agenda le puedas dedicar un poco de tiempo al Señor?, ¿Será que puedes hacer el tiempo?
Yo me imagino a veces a Dios mirándonos afanados en nuestros quehaceres, viendo como poco a poco nos alejamos de esa comunión con El, queriendo tener los mismos resultados como que si estuviéramos cerca de Él. Pensando inconscientemente que somos fuertes o buenos para esto o para lo otro, sin darnos cuenta que todo es por y para el Señor.
Puedo imaginarme al Señor observando como nosotros decidimos poco a poco a través de nuestra actitud y falta de organización alejarnos de esos momentos de intimidad, sin percatarnos que esos momentos de intimidad fueron los que nos han dado las victorias que hemos obtenido en nuestras vidas.
Creo que algo cambio en ti y ahora sabes que es, por tal razón hoy quiero motivarte a que puedas restaurar esos momentos íntimos con el Señor, quiero invitarte a que puedas dedicar unos minutos de tu valioso tiempo para permitir que Dios pueda ministrarte en especial manera y mostrarte su voluntad hacia tu vida, pero eso solo puede lograrse a través de esa comunicación que nunca debió dejar de ser.
No sé en qué momento del día lo puedas hacer, pero no dejes pasar este día, sin ir a solas con Dios, doblar tus rodillas, y hablar con Él como que si fuera tu mejor amigo, disfrutar de su presencia, sentir su abrazo, permitir que las lagrimas de gozo al estar en su presencia salgan de tus ojos, sentir como tu cuerpo se estremece mientras Dios te habla al oído y te dicta su voluntad para tu vida.
Estoy seguro que Dios se alegrara de verte cerca nuevamente, estoy seguro que tiene mucho que hablar contigo, y sobre todo tiene mucho que mostrarte, porque sin duda tu eres un instrumento muy útil cuando estás en sus manos.
Si sientes que algo ha cambiado en ti, es porque seguramente te estás alejando de esa intimidad con Él.
¡Vamos! ¡Renueva esa comunión hoy mismo!
“La comunión íntima de Jehová es con los que le temen, Y a ellos hará conocer su pacto”
Salmos 25:14
Autor: Enrique Monterroza
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