SER MADRE...
Hay poder en la vida, mediante la maternidad. Este privilegio de Dios, Su bendicion, (Genesis 1; 26- 28) ¡cambia hasta la atmosfera de una casa !¿verdad? Cuando esta bendicion se establece en tu vida, en tu casa, en tu vientre, lo hace tambien destruyendo toda maldicion y bendiciendo a tus generaciones, porque la palabra de Dios dice que: ¡"LA BENDICION TE SEGUIRA TODOS LOS DIAS DE TU VIDA" !(Salmo 23:6) No hay nada que supere la maternidad dada a nuestro vientre, porque una maternidad en Jesucristo es ¡UNA BENDICION! ¿Vas entendiendo esto?
Este es el privilegio de ser mujer, ¡SER MADRE!, y significa ser bendita de Dios, y una mujer que sabe que el poder de Dios esta dentro suyo, nada ni nadie la detiene ¡Nuestra simiente es la peor pesadilla para el infierno! (Genesis 3:15) Maria fue ejemplo de maternidad en su tiempo en la tierra. En Lucas 1:26-38, podemos apreciar como en ese mensaje la gracia de Dios cae en la vida de Maria, como la misma promesa de maternidad se repite una y otra vez. La actitud de Maria al recibir el favor, la gracia de Dios, e inclusive sobre su parienta Elizabeth la que llamaban la esteril, nos habla de la entrega, de la aceptacion a la gracia de la maternidad.
Como mujer, cuando recibimos esta bendicion física en nuestros vientres tambien estamos recibiendo la bendicion espiritual de Dios, la que se transmitira a nuestros hijos, porque si nuestro vientre ha sido bendecido para dar a luz hijos, tambien ha sido bendecido para dar a luz bendiciones en la vida de nuestros hijos, asi que ellos (te digan lo que te digan) ¡ SON FRUTOS DE BENDICION! Nuestro vientre no da a a luz hijos para maldiciones como la drogadicción, la homosexualidad, la delincuencia, etc. ¡NO! ¡El mismo vientre que lo dio a luz, si no esta cumpliendose esa bendicion en la vida de tus hijos, ¡HOY LO RESCATA! y ¡hay una sanidad fisica y espiritual , COMPLETA, sobre sus vidas! Porque has hallado gracia y favor ante el Altisimo, hoy has hallado Su atencion, y hoy esa bendicion que recibiste para tu vientre algun dia, y a la que no entendias hasta ahora, ha llegado a su hora.
Hoy volveras a concebir el milagro de la maternidad y enseñaras nuevos caminos a tus hijos (Isaias 49:1-5), porque ahora, HOY, le pondras hora, dia y nombre a tu milagro, porque sin saberlo pariste fruto de bendicion y luego su vida se volvio tal vez una maldicion. Pero Dios te dice hoy: ¡BASTA! Como madre, cortaras esa maldicion y te comprometeras a enseñarle a tus hijos el favor de Dios en tu vida y en la de ellos. HOY, como MADRE: ¡restauraras tu maternidad! ¡SEA COMPLETA TU OBRA!
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