Serpiente

 La obstinada serpiente es muy amiga del Buey, entre ambos hay una gran compatibilidad. La primera aporta sabiduría y el Buey mesura, perseverancia y concientización. El punto a tener en cuenta por la serpiente es que sus sueños de poder y abundancia necesitan un esfuerzo mayor y dedicación “full time”. La serpiente puede construir un imperio si se lo propone, es ambiciosa y a veces no repara en medios para lograr el fin. Es ahí donde tiene dificultades con el Buey; él quiere que las cosas se hagan por la ley, como corresponde. Sin embargo, podrán entenderse y amarse. Juntos lograrán sus objetivos y formarán un gran equipo. La firmeza y exquisita modalidad de la serpiente enamorarán al Buey, rudo, concreto y resistente. Ella sabrá alentarlo y alimentar la veta de amor romántico que esconde muy adentro el Buey. Un año fascinante para la bella serpiente.

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