Si desarrollamos estabilidad interna, de forma natural los demás sentirán más confianza hacia nosotros y recibiremos cooperación.
Si somos inestables, la confianza hacia nosotros fluctuará ya que habrá incertidumbre acerca de qué vamos a hacer a continuación.
Para ser más estables necesitamos fortalecer el ser, y para ello es importante ser más sistemáticos en nuestro progreso espiritual.
Para aflorar lo mejor de nuestro ser es preciso que seamos sistemáticos en nuestros hábitos positivos y en la práctica de la meditación.
Cuando somos sistemáticos diariamente podemos acumular poder espiritual. Siendo sistemáticos nos fortalecemos internamente y esto nos permite incrementar la estabilidad interna, y a su vez, siendo más estables es más fácil ser sistemáticos.
Ello nos protege de influenciarnos por diferentes estados de ánimo, o por las acciones de los demás. De lo contrario, nos podemos quedar atrapados en lo que sucede y perder el equilibrio.