…Un día uno de mis hijos que había venido a visitarme, llegó
muy apurado de la calle, porque había escuchado en la radio del auto un poema con
el que se sintió identificado….lo busco en Internet… pudo encontrarlo y lo
leímos juntos…nos abrazamos y se nos cayeron algunas lagrimas de amor…….
…Hoy yo quiero regalar a éste grupo ese poema….que no pude
saber quien es el autor…
Mamá,
el otro día, observando mi ombligo, me detuve a pensar qué pequeño y curioso
testimonio de una conexión tan importante, ¡Una conexión que me recuerda cómo
comenzó mi vida, cómo comencé a ser yo!
Hoy es difícil imaginar que alguna vez fuera tan pequeño, que dependía
completamente de alguien, Y ese alguien eras tú, mamá.
Tú me mostraste mi primera mariposa y mi primer arco iris.
Estabas a mi lado cuando ensayé mis primeros pasos.
Fuiste la primera persona que me hizo reír y escuchaste que la primera palabra
que dije fue: "Pa-pá" (¡perdóname, mamá)
Me encanta que la gente diga que me parezco a ti, ¡porque es verdad!
Tenemos los mismos ojos, las mismas orejas y la misma nariz.
Y si los miras de cerca, verás que hasta los dedos de nuestros pies son
parecidos.
Aunque, si lo piensas bien, no es tan sorprendente, siempre seré una parte de
ti por que tú me creaste.
Has esculpido mi rostro con un millón de besos cariñosos.
Me has enseñado todas las cosas importantes de nuestro mundo y mi lugar en él.
Todo lo aprendí de ti, mientras te escuchaba y te observaba.
Has compartido conmigo todos los valores que te hacen tan especial: la bondad,
el perdón, la honestidad, la perseverancia, la consideración y principalmente,
la paciencia.
También me enseñaste que, incluso el día más terrible, parece mejor con un vaso
de leche tibia y galletas. (Tu serena filosofía de leche tibia y galletas,
mamá, me ha ayudado a atravesar los momentos más difíciles, mucho más a menudo
de lo que puedes imaginarte).
Lo que trato de decirte, mamá, es que eres la base sobre la que se ha formado
mi personalidad. Y sólo me queda una palabra: ¡Gracias!
¡Gracias! por haberme colmado siempre de abrigo, de seguridad y de amor, por
haberme dado todo lo que necesitaba para crecer y desarrollarme.
¡Gracias! por que siempre estabas dispuesta a llevarme a todos lados.
¡Gracias! por las exquisitas comidas de las que te ocupabas con tanto amor, día
tras día, año tras año.
Y te agradezco especialmente, mamá, por aquel increíble aroma de pan recién
tostado, por las mañanas.
¡Gracias!, por dejar a tu tesoro de dos años jugar con tus posesiones más
valiosas y por no haber dicho: "Te lo dije, te lo dije", todas las
veces que hubieras querido.
¡Gracias! por levantarme cada vez que necesitaba un abrazo o ver algo desde la
mejor ubicación.
Lo que seguramente no ha sido nada bueno para tu espalda, mamá.
¡Gracias! por volar a rescatarme cada vez que me oías gritar: "¡Quiero a
mi mamá!"
Siempre has sabido qué decir o qué callar, para hacerme sentir mejor.
¡Gracias! por tantos cálidos y amorosos abrazos.
Por que arreglabas juguetes y corazones rotos una y otra vez, gracias mamá.
¡Gracias! por alentarme a buscar la belleza dentro de mí y a mantenerme siempre
en pie.
¡Gracias! por asegurarme que podría crecer y alcanzar el éxito en cualquier
cosa que me propusiera, si creía en mí de la misma manera en que tú lo hacías.
Pero mamá, los dos sabemos que aunque nuestra relación ha sido maravillosa, no
siempre fue tranquila y perfecta.
Por que yo, que soy la alegría de tus ojos no siempre te hice reír.
¡Perdóname! por las veces que te hice enojar, o por haber hecho que te
preocuparas por mí, y por todas las noches de insomnio que te causé.
¡Perdóname! por haberme revolcado en el barro, después de que me hubieras puesto
mi mejor ropa y mis zapatos nuevos y por preguntar: "¿Falta mucho?, ¡falta
mucho? Cada vez que salíamos.
Discúlpame por intentar huir tantas veces del baño y por ponerme difícil a la
hora de ir al colegio o cuando no me dejaste hacerme aquel tatuaje.
Me arrepiento de todas las ocasiones en que me puse insoportable,
especialmente, en los mejores restaurantes.
Hoy me siento mal por las veces que te desperté a las cinco de la mañana el día
de mi cumpleaños o en Navidad y por todas aquellas noches en que no había
manera de que me durmiera.
Perdóname por no haberte dado más tiempo para ti misma. Aunque fueran unos
pocos momentos tranquilos para pensar, para soñar.
Ahora comprendo a cuántas cosas renunciaste por mí.
Por que mi tiempo para jugar siempre estuvo primero que tu tiempo para
descansar, mis comidas eran más importantes que las tuyas, y mi entrenamiento
para dejar los pañales estaba absolutamente antes que nada.
Cada vez que tratabas de relajarte, yo irrumpía en tu habitación exigiendo:
"¡Mamá, me muero de hambre!"
"¡Mamá me aburro!"
"¡Mamá, no encuentro a mi mascota en ninguna parte. Levántate y ayúdame a
buscarla ahora mismo!"
Hoy comprendo cuántas cosas he logrado gracias a ti, mamá y quisiera tener más
de una vida para devolverte todo lo que me has dado.
Me mostraste un mundo lleno de amor y maravillas, me enseñaste a encontrar mi
propio camino y me has hecho mucho más feliz de lo que puedas imaginar.
Quiero que todo el mundo lo sepa: ¡Mi mamá es la mejor mamá del Universo!
¡Gracias! mamá. ¡Gracias por todo!
Un saludo muy grande al grupo y que todos tengan muy hermoso
comienzo de semana..
Hola Graci, solo pude mandarlo, como una respuesta a tu mensaje....si quiero enviarlo como un nuevo mensaje es donde solo me manda el saludo final....Bueno de cualquier manera lo agregué.... Gracias por tu ayuda... ....y que también tengas un feliz año 2010!!!!!!!!!