"Tu tienes en ti una condición innata de armonización; natural... silenciosa...sabia; una gran fuerza. Es una fuerza tan poderosa que puede establecer buenas relaciones con los otros, aumentar la paz en todas las naciones y equilibrar completamente el planeta. La Paz no es una simple palabra; es tu orden, una ley natural que rige en tu interior y tu Universalidad.
La Serenidad Debe ser tu estado de paz interior en todo momento. Y en el simple acto de vivir puedes entregarte al silencio interior, al desenvolvimiento del amor dentro de ti mismo, y bastará para transformarlas dificultades del día en limpios actos de aprendizaje.
En el muchas veces, difícil arte de ser comprendido; no le permitas a tu mente dar muchas vueltas, transformando momentos de paz en pura confusión.
Es en el silencio interior que puedes encontrar muchas respuestas. En el amor puedes restaurar tu alegría y tu bienestar.
En la paz interior tienes la serenidad para una relación armónica con la vida.
Si buscas la paz, sigue el camino para; recordarte..., para recordar tus características divinas, y enseñar el camino recorrido, para que tú mismo no lo olvides.
Y da la abundancia de los colores que traes dentro, la alegría que viene de tu mirar, la calma que viene de tu corazón.
Otorga tu conocimiento, brinda tu fuerza de voluntad, enseñando así a todos los hermanos a crecer, sin pretenderte maestro. Jamás compartas lo pequeño, la miseria, la escasez, el rencor, la envidia, la incomprensión, la maldad.
El ego, la mediocridad, la escasez de espíritu, el rencor y la envidia, debes erradicarlo totalmente de tu alma.
Dispensa tu Luz a los que sólo vislumbran la oscuridad.
Da agua a los que tienen sed. Proporciona calora los que sienten frío.
Surte de comprensión y esperanza a los que creen estar perdidos. Despierta la alegría a los que están tristes, para que estés cada vez más presente en tu plenitud, en tu Luz, en tu sabiduría, y en tu fe.
Y así darás alegrías a Aquel que está guiando cada paso que das, Jesús! Permítete la bendición de estar en Paz. En paz delante de serios problemas.
Dentro de ti hay Luz suficiente para abrirte caminos, y restablecer tu equilibrio, renovando así la armonía interior.
Y aunque nada puedas hacer o no quieras hacer por ti mismo, esta Luz que está presente en tu ser actuará renovando tus energías.
Esta Luz es la causa de tu constante evolución. Y el único trabajo que tienes que hacer, es darle permiso a esta Luz que te acompaña y ella te dará todo lo que necesitas para estar en paz, verdaderamente en paz.

Y Recuerda que:¡¡Las lágrimas de Jesús ,harán florecer tus Rosas, dejando para atrás las espinas de tu dolor!!!...
para recordarte que...
Esa Luz, la Luz de...Jesús, Siempre está contigo!!!

(Ludy Mellt Sekher)