No dejes que pase una semana sin usar un labial bien rojo, una
bota bien alta o unos jeans bien apretados.
Protege mis rulos del viento y mis aros y anillos de los ojos envidiosos.
Nunca dejes que falten en mi vida comedias románticas  y buenas
depiladoras.

Si tengo ganas de llorar, haz que llore un diluvio.
Y que haya salido de casa sin pintarme los ojos.
Para cada día de TPM (tensión pre-menstrual), dame una vitrina
con zapatos lindos.

Dame salud, tiempo libre, silencio.
Y que nunca falte absorbente en mi cartera.
En los embotellamientos, haz que prenda la radio y esté tocando mi
música preferida.

Dame fuerzas para que insita a mis hijos que coman ensalada,
digan "por favor" y "gracias", se limpien la boca con la servilleta,
hagan las pases y estiren la cadena.
Ciega mis ojos para las basuritas en las esquinas y los juguetes
en el medio de la sala (ellos van a estar siempre allá, ya me di
cuenta de eso)

Ayúdame para que llegue del trabajo y tenga ganas de jugar, de
ver  dibujos animados, contar historias o hacer cosquillas!
Y si no tengo la menor condición de mantenerme en pie, haz que
mi hijo llegue durmiendo de la escuela.

En días difíciles, dame persistencia para seguir con la dieta.

Protege mis pocas horas de sueño y no me juzgues mal si no me
levanto en el medio de la noche para tapar a mis hijos.
No dejes que mi frente se quede tan fruncida al punto de parecer
una falda plisada.

Y yo, una loca estresada.
Haz que el sol sea mi personal trainer, mi complejo vitamínico,
mi cargador de batería, y cuando yo te pida un día de lluvia, no me
preguntes por qué.
Para cada problema en el trabajo, dame un café recién hecho.
Entiende que, cuando rezo para que cancelen una reunión (no es
pedir de balde, puedes estar seguro!)

En medio de todo eso, haz que encuentre tiempo para volver a ser
novia, ir al cine, salir a cenar, besar en la boca, dormir abrazadita.

Ayúdame a que no falte gasolina y no me llante una rueda y, por
favor, aleja a las motos de mi espejo retrovisor.
Señor, por más malo que sea mi día, haz que él termine, y no yo.
Amén."

Autor desconocido