Por el océano tú y yo caminábamos,
Mano en mano, esta dulce noche
De luna, en el que cada paso que
Dábamos, nos besábamos.

¿Quien nos veía? Sólo la luna.

Nos besábamos de una manera
Muy linda y el manto de la noche
Nos cubría; y era tanto el deseo de
Amarnos que, entre muchos besos y
Abrazos, tiernamente me desnudabas.

Con la suavidad de tú lengua y
Fuertes manos, acariciabas
Cada parte de mi cuerpo
Me hacías morir de delirio y deseo.

El sudor que brotaba y corría
De tú cuerpo varonil era tan
Pura, como agua perfumada.

Con tú cuerpo me cubrías y
Yo, con mis piernas trasladadas,
Hmmm... ¡cómo te abrazaba...!

Con nuestro ritmo agitado y ardiente,
Nuestro mundo de emoción acelerado
De amarnos, nos llevó hasta el cielo.