Los árboles florecen, no es un negocio
; las estrellas brillan, no es un negocio
y no tienes que pagar por ello y nadie te exige nada.
Un pájaro viene y se posa en tu puerta,
te canta una canción y no te pide un certificado o algo así.
Ha cantado su canción y luego, muy contento se va volando, sin dejar huellas.
Así es como el amor crece.