Quisiera poder
esta noche fría de abril
lograr hablar con el viento…
Para contarle lo que siento
y seducirlo a una carrera
en todo vale…
En la que pueda volar como las aves
y acariciar el cielo…
En la que pueda encender el sol
en una noche oscura…
Y sin temor ni tristeza
dejarla sin luna ni estrellas…
Que esa noche sea única
la última quizá…
Pero inolvidable…
Que la voz de alguien al pasar
me susurre
que alumbro más que sol…
Que algún cometa…
Que las pequeñas luciérnagas canten
y los grillos bailen
al compás de la música
que entonan los sapos…
Que sea una noche…
Una noche de hadas…
para olvidar
las miserias que calcinan el alma…
Para olvidar al hombre
que tan poco supo amarme…
Para llorar a solas
en una noche de encantos.
|