Eclipses
Aprendí a disfrazar de fiesta
mis nostalgias y tu ausencia.
Aprendí, a eludir muy hábilmente,
las embestidas insinceras de la muerte
para prolongarnos, indefinidamente,
en escenarios invisibles y futuros.
Es un extraño ritual de ocasos tristes,
de fríos epitafios escritos en mármol…
Te lo advierto…
antes de que vuelva el recuerdo
a torturar mis días,
apagaré la llama de mi vida
y serás… Por los siglos de los siglos,
la única culpable de mi infierno triste.
Autor desconocido