Con la llegada del anochecer
y con el despertar del alba
se enciende en el horizonte
una luz que es casi magia,
que ilumina los senderos
de los corazones que aman,
que mantiene viva la llama
de los que esperan con ansias,
que guarda siempre un "te quiero"
cuando se va la esperanza,
y que siempre está presente
cuando la fe ya no calma.
Y ese anochecer temprano
y esa claridad del alba
...todas esas maravillas
que se encierran en mi alma,
las tatuaron con tu nombre
la esculpieron con tu cara
me acarician con tus manos
que se hicieron moldeadas
solamente para amarnos
con la luz de la mañana
con la luz de las estrellas
y la luz de tu mirada.
¡Oh! simplemente mi vida
es que te quiero y más nada.