Oh Niño Jesús, dueño de la vida y de la muerte, aunque indigno y pecador,nos postramos ante Ti
para implorar por la salud de la mamá
de nuestra querida Graciela, a quien tanto amamos.
La persona que te encomendamos sufre mucho, afligida por dolores, y no puede encontrar otra salida más que en tu
omnipotencia, en la que pone todas sus esperanzas.
Alivia, oh médico Celeste, sus penas, líbrala de sus sufrimientos y dale
perfecta salud, si esto es conforme al querer divino y al verdadero bien de su alma.
¡¡¡Gracias Amado Señor por escuchar nuestra súplica!!!
Amén